Yuli Gurriel es, sin temor a equivocarme, el pelotero más mediático y polémico de todos los que han pasado por las series nacionales. Nunca un jugador ha sido tan comparado, polemizado, amado y odiado a partes iguales.
Jugador de 5 herramientas; excelente tacto, poder, velocidad de piernas, habilidad para robar, y buena defensa. Un pelotero que, jugando como si pareciera no hacerlo al 100 por ciento, lo hace todo bien en el terreno de juego, y se ha convertido en una referencia del béisbol cubano del siglo XXI.
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Sus detractores recuerdan el doble play de Beijing, sus fanáticos, el jonrón a Panamá en el Primer Clásico Mundial. Lo cierto es que nadie es ajeno a la actuación de este fenomenal pelotero.
Desde sus comienzos, en el campeonato panamericano juvenil del 2001 en Camagüey, ya daba de qué hablar. Ese año, en el nacional de la categoría, había logrado un excelente rendimiento, bateando para 343, con 29 anotadas, 16 remolques, 9 dobles y un cuadrangular. En total recibió 27 boletos y tomó sólo 8 ponches.
Yuli Gurriel tuvo una temporada debut increíble; promedió para 300 de bateo, con 106 hits en 353 turnos al bate. Anotó 59 carreras, empujó 50 para el home y disparó 7 cuadrangulares, con 26 dobles y 5 triples.
Y no sólo eso, en la postemporada, en aquel playoff donde Sancti Spíritus estuvo a punto de lograr la corona. Yulieski fue un baluarte para los gallos, promediando para 349 con 22 hits en 63 turnos, conectando tres dobles, 2 triples y 2 jonrones. Anotó 6 carreras y remolcó 11 para el plato.
Desde el mismo inicio, con Yuli se rompieron esquemas no se puede olvidar que en el año 2002, año de su debut en series nacionales, hizo el equipo Cuba, al Campeonato Mundial Juvenil y a la Copa Intercontinental de mayores, celebrada en La Habana, algo muy poco visto en nuestro béisbol.
La polémica de Yuliesky Gurriel es tanta que ni en su propia provincia natal, Sancti Spíritus, era completamente respaldado. Apodos como Shakira, o frases como “Shakira tírate un paso” , se le escuchaba gritar al público del estadio José Antonio Huelga, a pesar de que, año por año, “El Yuli” quebraba marca por marca en el béisbol de esa provincia.
Por sólo por mencionar algunas: En la temporada número 49, en el 2010, implanta récord en average con 399. En esa propia temporada, logró récord anotadas con 90. También el récord de hits del equipo espirituano pertenece a Yulieski, con 134, en la Serie de Oro. En esa propia campaña impuso récord en dobles con 28. El de triples también le pertenece, con 11 en la serie 45.
De igual forma obtuvo el récord en jonrones y es, además, el único espirituano que ha logrado despachar 30 o más cuadrangulares en una Serie Nacional. En la serie 49, en el 2010, disparó 30 bambinazos. En esa propia serie, empujó 105 carreras, lo que representa un récord para la provincia, así como las 21 robadas de la serie número 45.
Desde muy joven integró la selección nacional donde ganó un puesto en los Juegos Panamericanos de Santo Domingo en 2003. Durante el I Clásico Mundial de Béisbol 2006 fue llamado “El Fenómeno” por los comentaristas de ESPN, al terminar el torneo formó parte del equipo todos estrellas.
Entre los principales logros de Yuliesky Gurriel está el ser el primer hombre en conectar 20 vuelacercas y robar 20 bases en una misma Serie Nacional. También es el único en lograr dos récords de bateo para dos provincias diferentes. Además de el ya mencionado con Sancti Spíritus, también lo consiguió con Industriales en su última Serie Nacional; bateando para astronómico 500. Récord que, como toda su carrera, es igual de polémico.
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Fue el primer pelotero cubano en sobrepasar la marca de 200 cuadrangulares con bate de madera exclusivamente. Además fue el tercer espirituano que alcanzó esa cifra; después de su padre, Lourdes Gourriel y Frederich Cepeda.
Fue líder individual en hits en la serie 44, en el año 2005, con 126 indiscutibles. En el apartado de los dobles; Yulieski fue líder en el año 2007, serie 46 con 28. Comandó los triples en el año 2006 con 11 y quedó de líder empatado con Yordanis Scull; de Las Tunas. En cuanto a los cuadrangulares, Yulieski fue líder jonronero en el año 2006, con 27 para la calle. Ese propio año empata el récord de impulsadas de Javier Méndez con 92 y más adelante, en el año 2010, logra marca personal de 105 remolques, resultando líder de la campaña.
Luego del cambio de equipo de él y sus hermanos, en la Serie Nacional 53; otro hecho polémico en su carrera, Yuli Gurriel lideró los jonrones en esa propia serie con 16; también fue el máximo empujador con 69.
Ya en su última campaña, en el 2016, logra el único título individual que le faltaba; el de bateo. Nuevamente la polémica lo rodeó; pues no sólo fue líder, sino que implantó nuevo récord en Series Nacionales con 500. Fue, además, el único pelotero cubano que se ha coronado como Champion Bate sin estar presente en el país.
Otra marca interesante, es que logró 7 temporadas con 20 o más cuadrangulares conectados; el qué más lo ha hecho igualado con el tunero Joan Carlos Pedroso, con la salvedad de que en cinco de ellas lo hizo de manera consecutiva.
El 11 de mayo de 2014, Yuli Gurriel firmó con el Yokohama Dena Baystars, integrante de la Liga Central en la NPB. Yuli actuó como camarero y antesalista.
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Hizo su debut en Ligas Menores el 3 de junio, alineando como tercer bate y designado. En ese partido disparo un cuadrangular en dos turnos al bate. El 8 de junio debutó en la NPB bateando de 4-3 en la victoria de su equipo 5×1 sobre los Tohoku Rakuten Golden Eagles.
El 13 de octubre, después de casi cinco meses de permanencia en la NPB regresó a Cuba. Fue aspirante a novato del año gracias a su exitoso desempeño.
El 5 de abril de 2015 la Federación Cubana de Béisbol anunció la cancelación del contrato Yuliesky con la NPB para la temporada 2015. A partir de la no presentación en tiempo del atleta al Club Yokohama DeNa Baystars a causa de las lesiones sufridas durante el desarrollo de la Serie Nacional de Béisbol.
El 2 de marzo de 2016, Yuli Gurriel y su hermano Lourdes Jr. llegan a Miami tras escapar del equipo Ciego de Ávila que disputó la Serie del Caribe. Tras permanecer varias semanas en Haití. En julio de 2016 firmó un contrato con los Houston Astros por 4 años a cambio de 56 millones de dólares; pero eso ya es otra historia.