Por Robiel Vega/ @RobielVega
Yulieski Gurriel ha tenido un inicio de temporada digno de admirar. A sus 36 años está demostrando estar en gran forma para seguir aportando al máximo nivel por algunos años más. Sus resultados han llegado, en gran medida, por la ostensible mejoría en la selección de lanzamientos, aspecto que le ha propiciado incrementar la cantidad de veces que se embasa, reducir la cantidad de ponches que se toma y por ende, el número de oportunidades en que pone la pelota en juego.
Su OBP está siendo espectacular, hasta el momento de redactar estas líneas, El Yuli promediaba para 449, gracias a los 15 boletos negociados y por supuesto, a sus 20 imparables en 63 veces al bate, que le da un excelente promedio de bateo de 317.
Las estadísticas pueden resultar engañosas, es cierto que ha bajado su average de bateo, pues en los últimos siete partidos promedia para 167 (24-4), pero más allá de ese indicador, su OBP es de 333, y sobre todo, ha empujado seis de las nueve carreras que ha logrado en toda la temporada, demostrando una gran efectividad.
En el partido de anoche frente a los Angelinos, Yulieski se fue en blanco en tres turnos, pero también recibió par de boletos, uno de ellos, en la baja de la segunda, con la casa llena, que sirvió para empujar de caballito a Carlos Correa desde la antesala la carrera que a la postre decidió el partido. Esta sería la remolcada 310 en su carrera en la MLB y su boleto 114.
Este fue una base por bolas completamente mérito del bateador, pues el lanzador de los Angelinos, Alex Cobbs lo montó en dos strikes sin bolas muy rápidamente, apoyado en su sinker de 90 millas y una splitter a 87 en zona baja que Yulieski logró impactar de foul.
A partir de ese momento, Cobbs lo siguió trabajando a base de splitter fundamentalmente, y poco a poco el cubano, con mucha paciencia, se fue acomodando en la cuenta, no sin antes dar un par de fouls ante lanzamientos en zona de duda. Tras la tercera bola, que cayó en zona muy baja, el derecho le lanzó otro splitter que mordió la zona baja pero no lo suficiente para hacer que el árbitro decretara el ponche.
De esta manera, y sin conectar de hits, el espirituano apeló a la experiencia que dan los años en el béisbol para hacer lo que era mejor para su equipo en ese momento; aprovechar cualquier brecha para traer una más para el home, una que sin saberlo, sería vital en el resultado final pues los Angelinos sólo pudieron fabricar 2 anotaciones.
Tras esta actuación, Yulieski dejó los siguientes números:
JJ: 18 CB: 78 VB: 63 C: 6 H: 20 AVE: 317 2B: 4 HR: 2 TB: 30 SLU: 476 OPS: 925 CI: 9 BB: 15 SO: 8 CB/BB: 5.2 CB/SO: 9.75 BB/SO: 1.88
Es interesante, además, ver como su paciencia en el home lo hace ser más efectivo cuando pone la bola en juego, pues su BABIP es de un excelente 340, además, es un bateador que exige a los lanzadores, pues su promedio de lanzamientos por comparecencia al bate es de 4.179, el mayor de toda su carrera (nunca había sobrepasado las 3.5).
También es un hombre que deja a pocos compañeros en circulación, solamente 21, para un bajo promedio de 1.17 por partido y apenas ha bateado una vez para doble play en toda la campaña de nueve oportunidades que ha tenido, datos éstos que ratifican su gran estado de forma y su impacto positivo en todos los aspectos de juego.
Por último, los dejo con estos datos, Yulieski, en 57 partidos del 2020 recibió sólo 12 boletos, en 18 de la presente ya lleva 15 y en toda su carrera, su frecuencia de boletos por comparecencias al bate es de 19.24, en esta va siendo de 5.2. Para los que piensan que los defectos en la caja de bateo no se pueden corregir a una avanzada edad, pues la Piña nos está dando una clase de superación en este 2021.
Sin más, les dejo disfrutar del momento en el que Yulieski recibe su boleto y empuja la tercera y decisiva carrera de los Astros en su victoria 8 por 2 ante los Angelinos.