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Por más que algunos optimistas avizoraran su regreso a las Ligas Mayores en 2025, a la postre la carrera de José Abreu sigue detenida. El gran inicialista cubano no ha vuelto a pisar los diamantes del mejor béisbol del mundo y las interrogantes caen por su propio peso: ¿Será esta una pausa momentánea, o habrá que asimilar la dura realidad de que todo ha terminado?
Los esfuerzos del astro antillano por reinsertarse en la MLB pasaron por intervenir en la liga profesional de Puerto Rico, pero tras un arranque promisorio los Senadores de San Juan lo liberaron en diciembre pasado con una estadística impropia de su categoría: average de .221, porcentaje de embasado por debajo de .300 y 21 ponches en 86 turnos oficiales.
El potencial ofensivo del MVP de 2020 se vino abajo con su salida de Chicago White Sox, equipo del que se convirtió en estandarte a lo largo de nueve temporadas resumidas en 243 cuadrangulares (tercero histórico de la franquicia) y 863 carreras impulsadas (quinto).
La carrera de José Abreu en Chicago fue un ciclón
Hasta el año 2022, la solvencia con el madero marcó la carrera de José Abreu. Había sido Novato del Año, lo habían convocado a tres Juegos de Estrellas y en su vitrina MLB asomaban tres Bates de Plata al mejor primera base de la Liga Americana.
Entonces vino el fatídico paso a Houston Astros. Todo indicaba que aún estaba apto para rendir a tope (en la campaña previa había descendido a 15 jonrones pero fijó OPS de .824), y el jugoso contrato de 58.3 millones por tres años parecía el estímulo perfecto para volver a disfrutar del slugger de 30 bambinazos y 100 remolcadas en el exigente concurso de las Ligas Mayores.
Mas no. Contrario a lo esperado, la carrera de José Abreu no demoró en dar muestras de declive en la populosa Houston y si bien cerró su primera temporada allí con 90 carreras empujadas, el slash line de .237/.296/.383 encendió todas las alarmas.
La debacle llegaría en 2024. Un doblete fue su único extrabases durante los 21 partidos iniciales (promedio de .099 en ese lapso), lo enviaron a las Menores para trabajar en su swing y, lastimosamente, al volver la situación no mejoró. Agotadas sus reservas de paciencia, el equipo decidió despedirlo a mediados de junio.
Trayectoria de Abreu parece haber llegado a su fin
La estadística avanzada no miente: la velocidad de salida de sus conexiones en las Ligas Mayores llegó a su nivel más bajo (87.8 MPH), y el porcentaje de conexiones a más de 95 MPH cayó casi diez puntos con respecto al curso anterior (de 41.6% a 32.6%).
Ahora mismo, José Abreu está sin trabajo pero cobrará 19.5 millones en 2025. Puede ser contratado por salario mínimo por cualquiera de las 29 organizaciones, y de todas maneras ninguna dará el paso de adquirir a un jugador de 38 abriles en franca decadencia.
Mucho me gustaría equivocarme, pero sinceramente veo imposible ese milagro que devuelva a las Ligas Mayores al mejor bateador que les llegó procedente de las Series Nacionales. En el máximo estadío de la pelota, la carrera de José Abreu ha concluido. Los fans lo extrañarán. Cuba también.
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Michel Contreras González
Periodista deportivo con treinta años de carrera. Graduado de Comunicación Social en la Universidad de La Habana, ejerció el periodismo en medios como Juventud Rebelde, Bohemia y Cubadebate antes de adherirse a la llamada prensa independiente, para la cual ha sido colaborador de la página deportiva en Oncuba, Cibercuba y Cubanet. Artículos suyos han aparecido en varias publicaciones extranjeras de habla hispana. Obtuvo numerosos premios en concursos de carácter provincial y nacional. Tiene publicados los volúmenes “Dioses Paralelos” (Ediciones Loynaz) y “Vuelos de Gavilán” (Unos y Otros Ediciones). Apegado fundamentalmente a la crónica, el comentario y la entrevista, la mayoría de sus textos versan sobre béisbol, fútbol y ajedrez, sin desdeñar el boxeo y el atletismo.
Lo dije antes que pasara. Yo se que es otra época, otro Béisbol más importante el $ que los compromisos con la fanáticada en Chicago ers un líder hasta le pusieron el nombre de un personaje celebre de la televisión. Miñoso nunca se fue de Chicago y Tony Oliva aún vive en Minnesota. Ir para el campeón lo presionó y de que manera.
Que Pito Abreu se retire a disfrutar sus millones que ya bastantes tiene y que no desprestigie su carrera y sus promedios. Hay que pensar que algún día el retiro tiene que llegar o si no que vuelva a ver la película cubana en 3 y 2.
Otro grande que se va ,junto al Yuli.