Por Alexander García Milián
Al momento de escribir estas líneas el cuarto partido del play off semifinal entre Matanzas y Las Tunas ya es historia, con el quedo todo sentenciado… a partir del día 11 de enero, la final de esta Serie 59 será animada por los cocodrilos matanceros y los toros camagüeyanos.
Pero los tonos del juego de béisbol, del juego de béisbol como fenómeno global, nos dan en esta ocasión para comentar como siempre respecto a varios temas y aquí la figura de Ariel Martínez se vuelve mediática por si sola.
Cuando le doy forma al artículo leo en un trabajo periodístico que el joven receptor- para muchos la joya de esta posición en Cuba- es objeto de críticas acérrimas por parte de la misma fanaticada matancera, entonces sus gestos para muchos desmedidos en el juego tres adquieren sentido.
Sí lectores, es Ariel Martínez que juega con su equipo en la serie pero es parte del roster de un elenco profesional en la Liga Japonesa- los Dragones de Chunichi- ; es Ariel Martínez que tras el contrato con MLB era una de las primeras opciones entre los jóvenes y no entiendo cómo se puede ser así ante tanta calidad y sobrado talento, más bateando por encima de 700 en la postemporada, remolcando carreras importantes y los duros del lineup – Gracial y Arrebarruena- siguen quedando a deber.
Debería la afición quitarse el sombrero una y mil veces ante Ariel, aplaudirlo, porque además es matancero de pura cepa y está ahí dándolo todo, poniéndole una ganas tremendas a su trabajo, resaltando que a la hora buena es cuando es, pues todos lo criticaban en el momento de empezar a jugar por su mala forma a la ofensiva, el tiempo lo reivindica y en estos Play Off… ya saben, va siendo el hombre grande.
Hay momentos en que la fanaticada se torna desagradecida y en estos momentos, con Matanzas metido en la final, el papel de Ariel Martínez toma un calado mayor, es el chico que les recibe a hombres como Yera, como Freddy Asiel, como Yamichel- de los mejores pitchers de Cuba- y lo hace bien, excelente diría.
Hoy el play off ante Las Tunas quedo atrás y los hechos le otorgan veracidad a los argumentos planteados al respecto, pues en el cuarto partido, Ariel dio tres sencillos y a pesar de que Gracial parece haber despertado sigue siendo Martínez el líder ofensivo del conjunto.
Más allá, cuando este sábado Matanzas vaya a discutir la corona contra Camagüey sé que Ariel será protagonista y todas estas críticas se irán por la borda, será protagonista porque ha demostrado siempre, no ahora, que tiene carácter y temple para asumir los retos y con eso, como siempre es con lo que me quedo.
Sin más, cuando esta postemporada comienza a brillar como no sucedía hace años, brindémosle respeto a un muchacho talentoso que camina por la acera de los grandes.
Nos vemos a la vuelta