Por Juan Páez
Dejémonos de medias tintas. Pareciera que los Yankees de Nueva York empiezan a despreciar a Aroldis Chapman. Da la impresión que Chapman, viviendo la peor temporada de su carrera y viniendo de una lesión importante, estorba en el camino de los neoyorquinos en 2022. A fin de cuentas, el zurdo cubano está en medio de un bajón notable, fue desprendido del rol de cerrador y será agente libre al finalizar la campaña.
Sobre todo por estas fechas, en las que se activa el mercado de cambios, los mencionados factores dejan una posibilidad que se posa sobre Chapman cual nube negra. El cubano con más salvados en la historia de las Mayores tiene altas probabilidades de marcharse de Nueva York en canje a otro equipo. ¿Podrá ese potencial nuevo destino ser Houston con los Astros?
Hay que pensarlo bien. Chapman tiene dos episodios lamentables en postemporada contra los Astros, pero ha lanzado bien en el Minute Maid Park, de Houston, en ronda regular desde el 2012: 9.1 innings lanzados, cinco hits permitidos, una carrera limpia, tres boletos 21 ponches.
Aparte, a los Astros no les vendría mal contar con un zurdo como Chapman en su bullpen, incluso manteniendo a Ryan Pressly como su cerrador. El antillano pasaría a ser el siniestro de mayor cartel en su cuerpo de relevistas, carente de serpentineros del brazo izquierdo. Sería una pieza de lujo para completar un gran rompecabezas, que ahora mismo tiene a Pressly, Ryne Stanek, Rafael Montero y Héctor Neris como grandes puntales.
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Una eventual llegada de Chapman a Houston también tiene sentido por las circunstancias contractuales del isleño. Chapman cobra 16 millones de dólares, por lo que los Yankees tienen dos opciones si quieren cambiarlo: 1) pagar la mayor parte de esos $16 millones si quieren prospectos o 2) recibir poco a cambio, pero liberarse del lanzador pagando una porción pequeña de esos $16 millones. Pareciera que, de darse un cambio con los Astros, sería la segunda opción.
Es cierto que Chapman está en su peor temporada. En apenas 17 innings, ha dado 15 boletos y le han anotado nueve veces. Su efectividad, tras 21 apariciones, es de 4.76. Tiene récord de 0-3 y los bateadores derechos le ligan para una línea de .240/.365/.420, con .785 OPS.
Pero a Chapman, el hombre de los 315 salvados, podría venirle bien un aire que no sea el neoyorquino para recuperar la confianza y restarse un poco de presión. Y Houston (sin ser Nueva York, con un cerrador establecido y con una ventaja de tranquila de 12 juegos sobre los Marineros de Seattle), podría ofrecerle esa comodidad a Aroldis y que este pueda ayudar al club sideral en el camino a la postemporada y en los playoffs en sí, donde podría en tal caso enfrentar a los mismos Yankees.
Sea Houston u otro destino, es muy tentador para los Yankees intentar “recuperar” a un sólido Chapman para tratar de cambiarlo y no dejarlo ir a la agencia libre sin recibir nada a cambio. En Nueva York, parecen tener nuevo cerrador, Clay Holmes, y la etapa del cubano como el cerrojo del equipo parece haber llegado a su fin. ¿Lo cambiarán los Yankees? ¿Será a Houston? La fecha límite de cambios es el 2 de agosto. ¡Amanecerá y veremos!
