Por Boris Luis Cabrera
Una embestida salvaje presenciaron los aficionados reunidos este domingo en el Coloso del Cerro de la capital cubana. Los Toros de Camagüey no creyeron en factores adversos, en cábalas ni en probabilidades, y arremetieron contra los lanzadores de Industriales en los dos primeros tercios de juego para demostrar una vez más y ante más de 47 mil testigos, el por qué terminaron en la cima de la tabla de posiciones al concluir el calendario regular de la fase clasificatoria.
Un jovencito de 21 años encaramado en el box en medio de rugidos temerarios y unos veteranos prendiéndole fuego al campo de juego con los maderos, fueron suficientes para arrinconar a los Leones de casa y colocarse a solo un triunfo de entrar en la final y hacer realidad las palabras de su timonel Miguel Borroto cuando hace más de seis meses declaró que llevaría a su tropa otra vez a los planos estelares.
La tropa de Rey Vicente Anglada reaccionó tarde y llenó de esperanzas las tribunas azules marcando todas sus carreras en los dos últimos episodios, pero el telón cayó cuando la pizarra gigante marcaba un 7-5 a favor de los visitantes después del out número 27.
Una ofensiva de apenas siete incogibles se combinó con el descontrol de los lanzadores industrialistas para que los ganadores tomaran una ventaja de siete carreras a la altura de la sexta entrada que fue imposible de descontar por sus adversarios.
Dos veces pisaron la goma del plato en la misma primera entrada ante un Erlis Casanova totalmente ido de picheo que regaló cuatro bases por bolas y permitió un cohete impulsor de Alexander Ayala antes de estallar ruidosamente del montículo.
El zurdo Misael Villa al rescate apaciguó los ánimos al dominar a dos rivales con los ángulos congestionados y se mantuvo hasta el quinto capítulo manteniendo a los Toros detrás de las talanqueras, pero perdió el control de sus envíos en esa entrada boleando a los dos primeros bateadores para luego soportar dobletes remolcadores de Leslie Anderson y Jorge Luis Peña que completaron un racimo de cuatro carreras y le dinamitaron el box.
Una sola carrera sucia pudieron anotarle los camagüeyanos al relevista Frank Herrera en una tremenda labor de contención de 4.1 entradas pero el apoyo de la caballería ofensiva llegaría tarde al crucial combate de semifinales.
Yosimar Cousin se metió en la piel de héroe y dejó hambrienta a la manada felina durante seis capítulos completos espaciando cinco inatrapables y ponchando a cuatro, graduándose así en esa intimidante plaza que lleva por nombre Latinoamericano.
Después de anotarle una al relevista Frank Madan en el octavo gracias a un cañonazo empujador de Dayán Garcia, las huestes azules calentaron el play de pelota pegándole un par de sencillos al bombero Isbel Hernández, quien se fue a las duchas luego de regalar un boleto dejando las almohadas desbordadas de habaneros.
Frank Luis Medina llegó descontrolado y tiró cuatro malas para forzar la segunda carrera azul de la noche y sendos errores de Ayala y del camarero Santiago Torres completaron un ramillete de cuatro anotaciones que puso de pie a miles de fieles que aún se mantenían en los graderíos, hasta que pudo dominar en una rolata inofensiva a la inicial al emergente Yoandry Urguellés para ponerle-al fin-el cuño a la victoria camagüeyana.
Este lunes será día de traslado de todos los equipos contendientes y el martes se estarán enfrentando otra vez en el estadio Cándido González, donde los anfitriones saldrán a buscar una victoria en tres juegos para lograr su boleto finalista.