En Guaranteed Rate Field, Chicago White Sox recibió la visita de Minnesota Twins en el primero de tres desafíos que efectuarán está semana. Joe Ryan y Michael Kopech fueron los abridores por «gemelos» y «patinegros» respectivamente.
Roco Baldelli, mánager de Twins alineó al estelar boricua Carlos Correa como tercer bateador y defendiendo el campo corto. Correa después de una Agencia Libre muy agitada está teniendo un lento inicio de temporada por debajo de los números que de él se esperan.
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En 25 juegos batea para anémico 202 (94-19) con solo tres jonrones, 10 carreras remolcadas y 23 ponches recibidos. Su línea ofensiva en general es muy pobre OBP 283/ SLG 351/ OPS 634/, y no muestra todo su potencial.
En la parte alta de la entrada inicial llegó Carlos Correa al cajón de bateo para consumir su primer turno del choque. La pizarra marcaba dos outs y las bases limpias. El diestro Kopach rápidamente se puso encima en el conteo con dos strikes sin bolas.
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En semejante situación adversa cualquier bateador sentiría los nervios y la presión del momento. Sin embargo, Carlos Correa con toda la experiencia acumulada en ocho temporadas en Grandes Ligas sabe mantener la calma y sacar el máximo provecho de su estancia en el Home Plate.
En esta ocasión no fue diferente, Michael Kopach seleccionó mal su lanzamiento y Correa no lo perdonó. Una slider de 85 millas por hora a la altura de las letras es un riesgo muy grande frente a un toletero de semejante nivel. Carlos Correa sacó rápido el madero y con un poderoso Swing Completo mandó la pelota a volar.
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El batazo cogió altura y tomó rumbo al bullpen colindante a la cerca del jardín izquierdo. Cuando los jugadores y fanáticos de Minnesota Twins se apretaban a celebrar el cuadrangular apareció Andrew Benintendi y les dijo que no. El «23» de Chicago White Sox nunca perdió de vista la trayectoria de la esférica. En el último instante saltó contra la cerca y sacó su mano enguantada por encima de los límites realizando una atrapada espectacular y robándole el jonrón a Carlos Correa.