Por Robiel Vega
Espectacular, no cabe otro calificativo para el tremendo desempeño de la armada cubana de boxeo en estos juegos olímpicos. Con la inclusión en la final de Andy Cruz en la final y la medalla de oro obtenida por el capitán, Julio César la Cruz, se buscará un resultado que no se logra desde Atenas 2004, obtener 4 coronas olímpicas.
En aquel momento, con un equipo completo de once pugilistas, se coronaron 5 pugilistas: Yuriorkis Gamboa, Yan Bartelemí, Guillermo Rigondeaux, Mario Kindelán y Odlanier Solís.
Hoy, con un equipo de apenas 7 boxeadores, el menor número presentado desde los anteriores juegos celebrados en Tokio, allá por el año 1964,osea, 57 años atrás, cuando sólo se inscribieron 6 peleadores, se buscará la hazaña de coronar a más del 50 % de los pugilistas, algo que sólo ha ocurrido en dos ocasiones, en 1980 (11-6) y en 1992 (12-7).
A primera hora, el doble campeón mundial de 2017 y 2019, Andy Cruz, derrotó cómodamente al australiano campeón de Oceanía, Harry Garside. El joven de 24 años nunca encontró la fórmula para entrarle al cubano, mientras que el matancero, con su acostumbrado boxeo elegante, le dio un baño de golpes al de la tierra de los canguros.
Fue ésta, sin dudas, la mejor demostración de Andy en el torneo, así que la decisión unánime de 30-27, incluso hubo dos que lo vieron ganar 30-26, fue el más puro reflejo de lo sucedido en el ring.
De esta manera, Andy accede a su primera final olímpica y tercera a nivel mundial y buscará mantener su invicto en torneos de máximo nivel. También, con él, descansan las posibilidades más sólidas de la delegación cubana de alcanzar la séptima medalla de oro y de lograrlo, estarían superando, en medallas de oro, a la edición de Montreal 1976 (6-4-3) y representaría la séptima mayor cosecha de metales áureos en la historia de los Juegos Olímpicos.
Unos minutos después, Julio César la Cruz le dio un baile, literal y figuradamente, al líder del ranking mundial en los 91 Kg, el ruso , el ruso Muslim Gadzhimagomedov, campeón mundial de 2019 e invicto en sus últimas 49 peleas.
Julio hizo su pelea y fue una verdadera sombra en el cuadrilátero, haciendo fallar a su rival constantemente y conectando siempre los mejores golpes. No hubo dudas y por la vía de la unanimidad, se concretó el segundo título olímpico del camagüeyano.
Con esta medalla de oro, la Cruz se convierte en el onceno bicampeón olímpico del boxeo cubano y tercero en lograrlo en estos juegos, algo que no ocurría desde la Olimpiada de Atlanta en 1996.
De igual manera, es el 5to púgil de la isla en lograr el bicampeonato en 2 divisiones diferentes y el séptimo a nivel mundial, toda vez que en 2016, el de la tierra del mayor triunfará en 81 Kg y ahora en la división inmediata superior, los 91 Kg.
La Cruz, además, alcanzó un hito en nuestro boxeo, algo que sólo el legendario Félix Savón había conseguido, 2 títulos o más en juegos olímpicos y 4 medallas de oro o más en Campeonatos del Mundo.
Julio César se coronó en los Mundiales de 2011, 2013, 2015 y 2017; mientras que ha logrado el oro en las Olimpiadas de 2016 y 2020. Por su parte, el guantanamero Savón, se coronó 3 veces en Juegos Olímpicos y en 6 ocasiones en Campeonatos del Mundo.
La delegación cubana, tras esta medalla, hasta el cierre de esta nota, en la posición 13 en el medallero, con 6 de oro, 3 de plata y 4 de bronce; colocándose en la segunda posición en las Américas, sólo superada por Estados Unidos y a la cabeza de América Latina.
En el último combate de los cubanos, se efectuará el día 8 de agosto, cuando Andy Cruz enfrente al estadounidense, Keyshawn David, quien venció en una pelea un tanto deslucida, pero entretenida al armenio Hovhannes Bachkov. Este combate será a la 1.32 de la madrugada hohora de Cuba.
Por ahora es todo, pero seguimos desandando este sendero olímpico.