ESCÁNDALO: Santiago a punto de perder por increíble forfeit (salvado por Cepeda)

Por Pablo Pichardo. Si algunos pensaron que el equipo de Santiago de Cuba podía recuperar este año el prestigio bien ganado a lo largo de la historia en las Series Nacionales y colarse entre los clasificados a la siguiente fase, pueden ir cambiando de opinión. Las Avispas acaban de ser barridos por los sorprendentes Gallos […]

Por Pablo Pichardo.

Si algunos pensaron que el equipo de Santiago de Cuba podía recuperar este año el prestigio bien ganado a lo largo de la historia en las Series Nacionales y colarse entre los clasificados a la siguiente fase, pueden ir cambiando de opinión.

Las Avispas acaban de ser barridos por los sorprendentes Gallos de Sancti Spíritus en medio de disputas internas y escándalos que han traspasado los límites de sus fronteras provinciales.

Aunque ningún medio oficial se ha pronunciado al respecto, varios son los reportes llegados a la redacción de swingcompleto sobre las situaciones acontecidas en este inicio de semana en los terrenos del José Antonio Huelga.

Sin bates para enfrentar el cotejo particular, llegaron los orientales a tierras espirituanas, en lo que constituye una violación flagrante al espectáculo y una falta de respeto a los aficionados y a los peloteros, que encima tienen que lidiar con esas altas temperaturas insoportables de las tarde cubanas de agosto, para tratar de hacer su trabajo lo mejor posible sobre el diamante.

¿Cómo puede explicar ahora la Comisión Nacional de Béisbol que un equipo de la Serie Nacional no disponga de bates para efectuar sus compromisos? ¿Quién responde?

De no ser por la decencia y la humildad de hombres como Frederich Cepeda, quien donó un par de ellos para que sus rivales no perdieran el choque por este motivo, ahora mismo el escándalo hubiera tenido proporciones inimaginables.

El golpe psicológico ha sido demoledor para los ocho veces campeones nacionales y las molestias han desencadenado una serie de acontecimientos dentro de la banca que tuvo su colofón en una pelea entre el director del conjunto, Eriberto Rosales, y el primera base Luis Guzmán, terminando este último por abandonar el equipo en medio del partido, según varios testigos presentes, lanzado su camiseta al suelo, motivado quien sabe por qué incomodidades internas.

Lo cierto, es que la salud mental de la escuadra anda por los tobillos y todos estos problemas han destapado una caja de Pandora que está atacando los buenos resultados que se suponían estuvieran teniendo los santiagueros en este inicio de campaña, creando un malestar general en una tropa talentosa, llena de jóvenes prospectos.

Según se ha informado en los medios nacionales, hace algún tiempo la industria deportiva está fabricando bates para su utilización en la Serie Nacional y en varios puntos de la isla, artesanos certificados también se están dedicando a estas funciones dispuestos a venderlos a bajos precios. Entonces, ¿de quién es la culpa de estas irregularidades? 

Mientras tanto, uno de los clásicos animadores de nuestro pasatiempo nacional a lo largo de estos años se sigue desmoronando en el terreno y los aficionados, inquietos, seguirán esperando el momento que Santiago vuelva a ser Santiago.