Por Juan Páez
Lo de Raidel Martínez en Japón no es cuento. En la jornada de este miércoles en el Béisbol Profesional Nipón (NPB, sus siglas en inglés), el relevista le dio rienda suelta a su tremendo dominio y se acreditó su séptimo salvado de la temporada 2020, en la victoria del Chunichi Dragons 4-1 contra el Hiroshima Toyo Carp. Como parte de los cubanos destacados en toda Asia, José Miguel Fernández pegó cuatro imparables.
En el caso de Martínez, quien llegó a 15 rescates de por vida en la liga japonesa, este concretó el triunfo del Chunichi con 1.0 inning de labor. No permitió hits, tampoco carreras y retiró a un rival por la vía del tercer strike. Apenas necesitó 13 pitcheos y, mostrando un control impresionante, 12 de ellos cayeron en strike.
Lo del diestro es de antología. Acumula 18.0 entradas trabajadas en la presente campaña, en las que solo ha recibido 11 inatrapables y una carrera limpia. Pese a que suma ocho bases por bolas y apenas ocho guillotinados, se las ha arreglado para sacar out tras out y ser uno de los relevistas más valiosos en lo que va de torneo, con un lauro, siete holds e igual número de salvamentos. Los rivales apenas le batean para .177 de average.
Dayán Viciedo, compañero de Martínez en Chunichi, disparó un sencillo en tres visitas oficiales a la caja de bateadores, con un boleto. Sus frecuencias terminaron en .267/.313/.461.
También en la acción nipona, Leonys Martín destacó pese a la derrota del Chiba Lotte Marines 12-4 ante el Hokkaido Nippon-Ham Fighters. El jardinero derecho, quien venía de conectar jonrón en cuatro juegos al hilo, ligó de 2-1, con sencillo, una carrera anotada y tres pasaportes recibidos. De esa manera, elevó su línea a .285/.421/.563, nótese el impresionante porcentaje de embasado.
Despierta
José Miguel Fernández se fue de 7-0 en sus dos más recientes juegos en la Organización Coreana de Béisbol (KBO, sus siglas en inglés), pero este miércoles repuntó con el madero. En el aplastante triunfo del Doosan Bears 15-8 frente al Samsung Lions, el designado conectó cuatro hits en cinco chances válidos.
La jornada de Fernández, quien dejó sus promedios ofensivos en .362/.428/.548, estuvo comandada por cuatro sencillos, aunque remolcó tres carreras y anotó la misma cantidad. Para el toletero, esto representa una bocanada de aire fresco, pues la última vez que disparó, como mínimo, cuatro incogibles fue el 7 de julio. No impulsaba trío de rayitas, por cierto, desde el 19 del mes pasado.