Por José Alejandro Rodríguez Zas
Hace apenas unos instantes, el boxeador filipino John Riel Casimero retuvo su cinturón mundial de campeón de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), al derrotar por decisión dividida al cubano Guillermo Rigondeaux.
En la pelea principal de un cartel boxístico efectuado esta noche de sábado en Carson, California, Casimero (30-4 y 21 KO´s) se llevó la mejor opinión de los jueces, pues dos de ellos lo vieron ganar con tarjetas de 117-111 y 116-112, mientras solo uno votó a favor de Rigondeaux (20-1, 13 KO´s) por 115-113.
Los que pudieron disfrutar el combate vieron una pelea muy pareja de principio a fin con muy pocos intercambios de golpes sobre el ring, a lo largo de los 12 rounds. Sin embargo, es posible que Rigo haya podido correr con mejor suerte, pero su estilo de boxeo de esquiva, evitando los golpes rivales y tirando muy poco, fue, quizás, determinante en las boletas.
El filipino comenzó impetuoso la pelea y en el mismo round de apertura llevo a Rigondeaux contra las cuerdas en varias ocasiones, e incluso lo tiró la lona en una oportunidad, para el delirio de sus seguidores. No obstante, el árbitro principal consideró que la caída fue por golpes no reglamentarios, detrás de la cabeza del cubano.
Algo parecido ocurrió en el quinto asalto, cuando Casimero se decidió nuevamente a atacar a Rigondeaux, quien se abrazaba a su rival y esquivaba los golpes, con una suerte de danza sobre el cuadrilátero.
Previo a eso, en los rounds dos, tres y cuatro, hubo mucha paridad y poca acción sobre el ring, con un Rigo evitando las entradas del filipino y desesperándolo con su boxeo poco vistoso para el profesionalismo y un Casimero buscándolo a ratos. Esos asaltos muy parejos, de poco intercambio, pudieron costarle la pelea al cubano.
Aquí es muy válido recordar, sin ánimo de justificar la actitud del cubano, que Guillermo Rigondeaux ya tiene 40 años y es muy difícil aguantar un ritmo constante de pelea durante 12 asaltos, mientras que su rival, Casimero, solo suma 31 primaveras.
Del sexto round en lo adelante, casi se desapareció por completo la acción sobre el ring, lo cual le hizo mucho más difícil a los jueces la decisión, en medio del abucheo del público presente
Guillermo Rigondeaux seguía evitando al filipino Casimero y este persistía en su búsqueda inútil por todo el cuadrilátero, para forzar el combate. Incluso, en una ocasión, Casimero se detuvo en medio del ring para pedirle más boxeo a “El Chacal”, quien obviaba sus reclamos.
Solo en el round final, pudimos ver algo más de intercambio entre ambos pugilistas, pero ya los jueces habían decidido el combate. Según se puede apreciar en las boletas oficiales, del octavo round en lo adelante, a pesar de la paridad vista en el ring, la mayoría de ellos fueron para Casimero.
No quedó claro sobre el ring que Casimero haya derrotado a Rigondeaux, pero tampoco Rigo fue convincente y, como en sus tiempos de amateur, él sabe bien el riesgo de dejar las decisiones a los árbitros. Y estos vieron ganador al púgil filipino, quien mantiene su faja de campeón de la OMB.
Después de esta pelea, es muy posible que los días de Guillermo Rigondeaux sobre el cuadrilátero del boxeo profesional, al menos al máximo nivel, hayan acabado. Esperemos que exista alguna luz en la oscuridad del pugilista cubano, quien queda en deuda con sus seguidores, deseosos de ver toda su calidad sobre el ring.
Sin embargo, todavía queda mucho boxeo por estos días. Muy pronto tendremos otro esperado combate, Yordenis Ugás vs Manny Pacquiao. Nos vemos.