Por Álex Fernández Fernández
Henry Urrutia siempre ha estado más cerca de competir contra el equipo Cuba que de su lado, al menos en los últimos cinco años.
Fue así desde la temporada pasada cuando se especuló sobre su posible inclusión en el equipo nacional que participó en el Preolímpico de Estados Unidos.
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Tras algunas declaraciones que no gustaron en la Federación Cubana, Henry quedó excluido y ayer representó a República Dominicana en la Serie del Caribe.
En partido que finalmente ganaron Los Tigres del Licey frente a los Agricultores, estuvo Urrutia quien manifestó al final del desafío estar “súper contento”. Así lo hizo saber a Gretel Janet, enviada especial de la radio oficial de Cuba al evento.
“Mi segunda Serie del Caribe consecutiva, algo más para mi carrera ”, dijo el infielder con pasado en los Orioles de Baltimore en la MLB.
“Primero darle muchas gracias porque me han seguido, me han escrito en Facebook. Estoy muy contento de que no se hayan olvidado de este servidor”.
A pesar de las desavenencias con el sistema deportivo reinante en la Isla, el jugador quiso aclarar algo clave para la afición.
“Que siempre sepan que donde quiera que yo me pare estoy representando a mi tierra”.
Hace pocos años a los atletas de Cuba se les tenía terminantemente prohibido contactar con figuras que ya no estuviesen dentro del sistema antillano oficial.
Sin embargo, algo ha cambiado porque en este evento en Caracas, Henry Urrutia pudo charlar con los tuneros de su generación.
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“Super contento, nos fuimos, nos sentamos ahí en el hotel a conversar. Hablamos de muchas cosas, recordarnos los viejos tiempos.”
Cerró la entrevista con declaraciones sobre el peso del apellido Urrutia, una marca registrada de Las Tunas, con su padre Ermidelio, y Osmani, el Señor 400.
“Oye, el Urrutia que menos batea soy yo. Hay que hacer todo lo posible por poner ese apellido en alto que empezó con mi papá y siguió con Osmani”.
En la LIDOM, Urrutia la rompió. Exhibió línea de OBP 387/ SLG 426/ OPS 813/ y se coronó con 318 de average producto de 47 indiscutibles en 148 turnos al bate.