Por Robiel Vega/@RobielVega
En un batazo de línea descomunal, ante un lanzamiento en rompimiento, llegó el cuarto jonrón de Yoan Moncada en la temporada y el número 60 de por vida. El batazo llegó con el partido bien reñido, 5×4, favorable a los White Sox sobre los Orioles, en un choque donde 5 de las 7 carreras, fueron empujadas por cubanos.
El cienfueguero ya había recibido par de boletos; uno en la primera y otro en la tercera, con el que anotó empujado por su compatriota José Dariel Abreu. Pero en la sexta entrada le correspondió el momento de la responsabilidad, con hombre en segunda y un out en la pizarra, le golfeó una slider a 84.4 MPH en la zona pegada para ponerla a viajar en condiciones.
Llama la atención dos datos de este batazo: primero, que siendo una conexión sobre lanzamiento de 84 MPH saliera proyectada a más de 110 (110.8MPH). Y segundo, que siendo un batazo completamente alineado, con un ángulo de salida de apenas 22 grados, recorriera una trayectoria de 422 pies. Datos éstos que evidencian la contundencia y velocidad del estacazo.
Estas carreras, las empujadas 27 y 28 de Moncada en este 2021, fueron el puntillazo y la definición de un muy cerrado encuentro. De igual manera, el antesalista cubano llegó a 26 anotadas, 50 producidas en 47 juegos y un total de 36 boletos, para dejar su OBP en un espectacular 415 (277 de AVE).
Algunos datos interesantes de este jonrón es que, hasta ahora, todos han sido como local. También fue su primer jonrón en este mes de mayo que casi finaliza, pues desde el 29 de abril, hace exactamente un mes, no se llevaba la cerca.
Otro dato interesante y a tener en cuenta es que éste fue el segundo jonrón de Moncada en conexión de línea, pero lo realmente importante es que batea para 652 (46-30), cuando lo hace en este tipo de conexión. Para 333 cuando lo hace de fly y apenas 208 cuando conecta por el suelo.
Finalmente, tres de datos históricos, Moncada se convirtió en el cubano número 25 en conectar 60 o más jonrones en Grandes Ligas, y lo hace con apenas 26 años y 6 temporadas. También llegó a 215 empujadas de por vida y se colocó a sólo 6 de un ícono del béisbol cubano, Armando Marsans, mientras que con 244 anotadas se puso a 3 de José Tartabull.
Sin más, disfruten de éste tremendo batazo: