Está a punto de finalizar el mejor mes para Jorge Soler desde que se puso el uniforme de San Francisco Giants, franquicia por la que firmó tras su salida de Miami Marlins.
El cubano llegó a California con la responsabilidad de ser ese bate que logre conectar batazos de poder y aportar en la producción de carreras de su equipo, el cual quiere de nuevo ser protagonista en la Liga Nacional. Por ahora buscan acercarse a .500, pues están con récord de 39-42, todavía lejos del líder de la División Oeste, que es Los Angeles Dodgers.
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Una buena oportunidad para mejorar ese accionar se dio este 27 de junio, fecha en la que San Francisco Giants recibió en Oracle Park a Chicago Cubs. Jorge Soler salió como designado y quinto bate de los suyos.
El comienzo no resultó positivo para los locales, pues la visita consiguió ponerse al frente con tres carreras tempraneras en el tercer inning, dándole un 3×0 parcial que presagiaba una derrota.
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Jorge Soler cambió la cara de San Francisco Giants
No obstante, Jorge Soler estaba allí para cambiar la marcha. Así fue como en su tercer turno se paró a batear con par de outs y hombres tanto en primera como en la segunda almohadilla.
El cubano se puso en cuenta de 0-2 y parecía que ahí se terminaba el intento por remontar de San Francisco. Pero Jorge Soler respondió cuando se lo necesitaba y justo en el quinto envío descifró al zurdo Shota Imanaga, el cual probó con una recta a 93 millas que fue fuertemente conectada por el antillano.
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Fue así como la pelota viajó 357 pies de distancia por el jardín izquierdo. Lucía como un jonrón, aunque cayó cerca de la pista de seguridad y luego abandonó el campo para que se decrete el doble por regla.
De esta manera, remolcó a Austin Slater y llevó a Matt Chapman hacia la tercera base. Así fue como, ya instalado en la intermedia, anotó posteriormente el empate tras el sencillo de Luis Matos.
Ahora Jorge Soler elevó su promedio al bate a .223, con 29 carreras impulsadas y 38 anotadas. También arribó a 176 dobles de por vida en Grandes Ligas, quedando a solo uno de Yasmani Grandal, el cual ocupa actualmente el puesto 22 entre los cubanos que se han desempeñado en MLB.
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