Por Yasel Porto
El estelar abridor de los Houston Astros Justin Verlander siguió sumando méritos a una carrera deportiva con lo suficiente para entrar al Salón de la Fama de Cooperstown cinco años después de su retiro.
En su duelo contra los New York Yankees dentro del partido inicial de la Serie de Campeonato de la Liga Americana, el legendario monticulista impuso una nueva marca en postemporada.
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Verlander dejó atrás los 213 del todavía activo lanzador de Los Ángeles Dodgers Clayton Kernshaw. Había comenzado el juego en 208, por lo que los ponches frente al jonronero Harrison Bader e Isiah Kiner-Kalefa sirvieron para empatar y romper la marca del zurdo californiano.
Este legendario jugador no ha creído en sus 39 años de edad para tener una temporada de ensueño, en la cual es firme candidato a luchar por el premio Cy Young. En la campaña tuvo balance de 18-4 con efectividad de 1.75 y un WHIP de 0.83. Números sensacionales sin duda alguna.
En el primer partido de esta Serie de Campeonato la actuación de Verlander fue sido soberbia, con solo una carrera (cuadrangular de Bader), apenas tres incogibles en seis entradas y once rivales sacados fuera de juego por la vía de los strikes.
El tórrido accionar ofensivo de sus compañeros le dio la victoria y puso delante a los Astros en el inicio de la ALCS.
