Por Alexander García
Las palabras se pierden y en un constante ejercicio de búsqueda, de encuentros, otra vez llegan para escribir quizás la más sentidas de las crónicas- Kendrys Morales anuncia su retiro de Grandes Ligas- ; pienso en estos trece años, ¿Qué son trece años?… nada, pues me parece que fue ayer cuando lo ví debutar con Industriales y ya va casi para veinte años.
Otra vez le tomamos el pulso a la escritura y las analogías, los epítetos, las metáforas, todo se queda corto para hablar de Kendrys… entonces veo tal vez la última esperanza, lo veo en el Latino, jugando béisbol en activo por última vez y pienso que es una locura.
Pienso que es un deja vu, uno que viene así de pronto tras conocer la noticia y veo la imagen otra vez de Kendrys Morales retirándose del béisbol en La Habana…
Las leyendas dan pie a todo, por ello es imposible no soñar, creer, suponer, pensar, pues con Kendrys se va el símbolo de una generación; más allá de esos trece años al primer nivel, de sus 213 jonrones, de su última temporada en los Yankees de Nueva York, con Kendrys se va el último atisbo de grandeza que tuvo la pelota cubana y es lo que pienso como muchos.
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Las fotos conforman un collage con todas las facetas de la carrera de Kendrys Morales; una foto de el con Industriales allá por 2002, delgado, joven; otra ya con los Angelinos, más fuerte, imponente; luego el paso de los años marca huellas y los vemos curtido, más grueso, con una cara más cansada, Reales, Marineros, Azulejos, Oakland…y llega el bombazo; como los grandes, Kendrys va a los Yankees y sienta la pauta de su despedida.
La gente agradece, llora, los mensajes en las redes fluyen sin parar, uno lloran , otros aún no lo creen, en ESPN, Marly Rivera confirma la noticia y el eco retumba todavía- Kendrys Morales anuncia su retiro- …
… Mi mente evoca tantos recuerdos, tantos jonrones; contra Kleber Ojima en el Latino, aquel inmenso por el centro del Angels Stadium que provoco su fatídica lesión, tantos con Industriales, luego aquella racha impetuosa con los Azulejos que lo metieron en la historia del béisbol latino como el mejor ambidiestro… después otra vez como la realeza… en el mismo Yankee Stadium, la larga por el right field- ¡Waoo!,! Un tipo bárbaro!
Con estos recuerdos retengo la figura inmensa de Kendrys Morales y sí, hoy Kendrys se va de las Grandes Ligas pero los grandes siempre dejan su huella, con ellos el adiós no es para siempre.
Nos vemos a la vuelta.