Por Modesto Agüero
Conversar con Lourdes Gurriel es hacerlo con uno de los más grandes bateadores del béisbol cubano. El que todo mentor quisiera tener en el cajón de bateo a la hora de decidir un encuentro. Es por eso que el inolvidable narrador Bobby Salamanca lo calificó como “el hombre de los grandes momentos”.
De origen campesino y hablar pausado, el jefe del clan Gurriel, nació en el poblado de Menéses en Yagüajay, provincia de Sancti Spíritus.
Nuestra amistad comenzó en los años 80, cuando él estaba en plenitud de su carrera, así que dialogar con Lourdes era algo cotidiano cuando ambos estábamos en Cuba. Ahora es reservado solo por vía telefónica, ya que vivimos en diferentes países.
¿Cómo te inicias en el béisbol?
-Comencé a jugar pelota a los 13 años, ya que era corredor de atletismo, pero tuve una lesión y mi papá, que en paz descance me llevó para el municipio Yagüajay y el entrenador Juanito Jhon me inició en este deporte.
¿Cómo llegas a la Serie Nacional?
-A los 18 años ingresé en el equipo provincial de la región de Caibarién, llamado Agrícola, donde quedé en segundo lugar de los bateadores y fui seleccionado para integrar Azucareros para la Serie 1976-77. Ya al año siguiente fui líder en dobles con 12 empatado con Armando Capiró y Jorge Beltrán.
Se habla mucho de las ventajas del bate de aluminio sobre el de madera para los bateadores. ¿Qué opinas de eso?
-Con el bate de madera jugué una temporada y me fue bien pero no cabe dudas que con el aluminio es mejor. El bate de aluminio es mucho más fuerte que la madera y los batazos salen con más solidez.
En las Series Nacionales, ¿cuál fue el lanzador que más trabajo te costaba conectarle?
-Sin dudas Omar Carrero. Con sus lanzamientos laterales me dominaba sin mucha dificultad. Era sobre todo muy difícil para los bateadores derechos ya que por el mismo ángulo tiraba la slider y la sinker, dos lanzamientos que rompen contrarios.
Eras calificado por el gran Bobby Salamanca como “el hombre de los grandes momentos”, ¿cómo te preparabas para ser tan oportuno?
-Primero tuve suerte que casi siempre me tocaba a mí batear en ese momento. Yo me preparaba mentalmente, haciendo lo posible por escoger el lanzamiento que el pitcher me pudiera tirar, para tratar de no fallar. Por eso tuve buenos resultados, con el favor de Dios, en todos los juegos que decidí en mi carrera deportiva”.
¿Fue superior la calidad del béisbol que tú jugaste a la actual en las Series Nacionales?
-No me gusta comparar épocas, pero el béisbol que yo jugué era más fuerte que este de ahora, debido fundamentalmente a que Cuba ha tenido muchas pérdidas de buenos peloteros por eso la calidad ha mermado.
¿Consideras a tu hijo Yulieski, superior a ti como bateador?
-Si lo considero, en los números en las Series Nacionales solo lo supero en menos ponches, en los demás está por encima, además de tener buen rendimiento en el mejor béisbol del mundo.
¿Te hubiera gustado jugar en Grandes Ligas?
-Por supuesto que me hubiera gustado como todo pelotero.
Resulta curioso que como mánager de Sancti Spíritus en la edición 50 de la Serie Nacional, Lourdes dirigiera a sus tres hijos: Yuniesky, Yulieski y Lourdes Jr. (Yunito).
Lourdes ocupa un lugar entre los 25 primeros en el béisbol cubano en: (12) Boletos intencionales, (15) en hits, (17) en dobles, (22) en impulsadas, (23) en jonrones y (24) en Average.
Comparación con Yulieski en Series Nacionales:
Sacamos los promedios por Serie Nacional ya que Lourdes Gurriel jugó 5 Series más que Yuliesky.
LOURDES GURRIEL-
SN: 20, Hit X S.N.: 101.3,
2B X S.N.: 16.3, 3B X S.N.: 1.9,
HR X S.N.: 12.3, CI X S.N.: 53.8,
AVE: 323, OBP: 410, SLUG: 506.
YULIESKY GURRIEL-
SN: 15, H X S.N.: 113.6,
2B X S.N.: 21.8, 3B X S.N.: 4.2,
HR X S.N.: 18.8, CI X S.N.: 75.6,
AVE: 337, OBP: 423, SLUG: 594.
Todos los números favorecen a Yulieski, pero no cabe dudas que estamos hablando de dos grandes bateadores en cualquier béisbol del Mundo.
El Jefe del clan Gurriel, constituye un gran ejemplo de calidad y dedicación al béisbol que sus hijos han sabido mantener.