Por Jesús Pérez Vichot (Chuchi)
Esa famosa frase de «utilizar la velocidad en función de la ofensiva» no todos los equipos saben llevarla a la práctica. Sin embargo, un eficiente y oportuno corrido de bases puede dar la victoria en un encuentro. Por ejemplo, en esta temporada de Grandes Ligas hay varios equipos que sobresalen en este aspecto y lógicamente les va muy bien a la mayoría en cuanto al promedio de ganados y perdidos.
El conjunto con mejor porcentaje de corredores que avanzan desde la inicial hasta la antesala con un sencillo, es el de Atlanta Braves (43.2). Con corredores rápidos como Ronald Acuña Jr., Dansby Swanson, Ozzie Albies o Michael Harris en su roster, no es de extrañar que el manager Brian Snitker lleve a cabo estos corridos de bases en muchas ocasiones y que el resultado sea satisfactorio. Aunque anclar en la Intermedia es situarse ya en posición anotadora, resulta más fácil llegar al Home Plate desde la tercera almohadilla.
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Después de los actuales campeones de la Serie Mundial, aparece el equipo de Oakland Athletics con un 39.8 %. Jugadores veloces como Seth Brown, Ramón Laureano, Tony Kemp o Sheldon Neuse, no dudan en pisar la segunda almohadilla y continuar rumbo a la antesala cuando están en la inicial y sus compañeros de equipo conectan un sencillo. Luego le siguen los Arizona Diamondbacks (38.4 %), Los Angeles Angels (37.5 %) y St. Louis Cardinals (36.6%). Estos conjuntos están muy por encima de la media actual de MLB, que es de 31.0 %.
En la presente contienda el porciento de carreras anotadas en un inning cuando hay un corredor en segunda base y un out es de 40 %. Mientras que cuando el corredor se encuentra en la tercera almohadilla y un out, anota en el 67 % de las veces. Lógicamente es más fácil anotar cuando se está en la antesala que desde la Intermedia. Un elevado de sacrificio, un indiscutible, passed ball, wild pitch o balk y las probabilidades de marcar una carrera son mayores.
Como para cada estadística existen los mejores, también están los peores. En este caso, el conjunto con el peor porcentaje de corredores que llegan a la antesala desde la inicial con un sencillo son los Philadelphia Phillies (22.8 %). Con un lineup compuesto por grandes toleteros, es de esperar que jueguen principalmente «al batazo». Aunque tampoco se puede negar que J.T Realmuto, Bryce Harper, Jean Segura y Odubel Herrera son hombres rápidos, que en algún momento o situación del juego pudieran avanzar dos o más bases.
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Los otros equipos negativos en este aspecto son los Detroit Tigers (25.4 %), Seattle Mariners (25.5 %), Toronto Blue Jays (25.9) y Tampa Bay Rays (26.5 %). Aquí llama la atención estos dos últimos conjuntos. Ambos clubes cuentan con jugadores jóvenes que poseen velocidad y agresividad en el corrido de las bases, así se les ha visto. Sin embargo, tanto Charlie Montoyo como Kevin Cash (managers de Blue Jays y Rays respectivamente) no han sabido sacarle el máximo a sus jugadores más rápidos o simplemente no se han dado las suficientes jugadas ideales para buscar esa base extra y lograr un mayor porcentaje. Aún así, no les va mal en este 2022.
Esas pequeñas cosas que se pueden lograr en un juego de pelota, como es un eficiente corrido de bases, pueden marcar la diferencia. A un corto y largo plazo el equipo que arriesga buscando una base más (tercera almohadilla) con rapidez y astucia de sus jugadores, coachs y manager, es más propenso a alcanzar la victoria que el conjunto que se conforma con solo llegar a la mínima posición anotadora (segunda base). Claro, siempre hay excepciones, también los hay que sin «arriesgar mucho» ganan más de lo que pierden.