Con perseverancia, Néstor Cortés Jr. se ha convertido en una pieza clave en el pitcheo de New York Yankees. Desde la temporada del 2021, ha sido uno de los abridores zurdos más destacables no solo de los neoyorquinos, sino del juego en general. Pero no todo lo bueno llegó tan rápido.
Néstor Cortés Jr. tuvo tres intentos fallidos para establecerse en las Grandes Ligas. En 2018, debutó con Baltimore Orioles y fue apaleado en apenas 4.2 innings. Luego regresó a los Yankees y, como relevista, dejó efectividad de 5.67 en 33 apariciones en 2019. Para el 2020, fue a parar a Seattle Mariners y recibió castigo en 7.2 entradas.
Ya quedándose sin chances, volvió a Nueva York para una tercera experiencia con los Yankees. Ahí le cambió la vida y, de a poco, se convirtió en pieza fundamental de la rotación neoyorquina. En 45 aperturas desde el 2021, tiene récord de 16-7, efectividad de 2.64 y 253 ponches en 249.0 entradas lanzadas.
Sin embargo, Néstor Cortés Jr. siente que no recibe tanto crédito como merece.
“Yo probablemente no debería estar aquí”, dijo el zurdo cubano a MLB.com. “Pasando por las Ligas Menores, lanzaba 87-88 millas por hora, no era muy grande y no tenía pitcheos dominantes, por lo que la gente no me veía como un prospecto de alto nivel. En el mejor de los casos, creían que sería un quinto abridor o un relevista largo. Por eso digo que nunca debí haber estado aquí. Obviamente, la corriente se cambió”.
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El año pasado, Néstor Cortés Jr. formó un gran trío abridor en New York Yankees con Gerrit Cole y Luis Severino. Esta vez, se unió Carlos Rodón a la rotación del mánager Aaron Boone, pero el cubano sigue con un puesto importante.
Su temporada 2023 comenzó con dos victorias en sus primeras tres presentaciones, además de 2.60 de efectividad en 17.1 innings.
A Néstor Cortés Jr. le preguntaron lo siguiente: “Pareciera que sientes que la gente piensa que lo que estás haciendo es simplemente suerte. ¿Por qué?”.
El siniestro isleño, de 28 años, no titubeó con su respuesta…
“Lo leo todos los días en Twitter. La gente piensa que lo mío no es real, piensa que esto podría terminar pronto. Y verdaderamente, sí podría, pues no estoy diciendo que durará para siempre. Acepté el hecho de que mis primeros tres años no fueron buenos y pasé la página. Espero que la gente haga lo mismo. Cada vez que salgo a lanzar, intento hacer lo mejor que puedo. Ojalá la gente me empiece a dar más crédito por eso”.
Cada vez que sale a lanzar, Néstor Cortés Jr. demuestra que lo suyo es real, muy real.
