Por Álex Fernández Fernández
Hace bien poco Alejandro Kirk en su visita con Toronto al Yankee Stadium, roleteó entre tercera y short stop. Parecía que la bola se iba fácilmente de imparable al left, pero ¿saben qué? Ahí estaba Oswaldo Cabrera para no solo atraparla, sino además para dar un salto con giro, lanzar a primera y ponerlo out.
Enseguida todos nos preguntamos por la chapa de este chico de 23 años, quién acaba de establecer un récord con la franquicia de los Mulos: debut en la MLB en cuatro posiciones diferentes.
Y no es de asombrar tanto. El morocho, que bien en el futuro podría con el guante intentar emular con la leyenda de Omar Vizquel, comentó lo siguiente a MLB.com:
«Desde pequeño los regalos que me daban mis padres eran guantes y pelotas. Desde los tres años amaba este deporte. Mis padres dejaron de comprarse ropas y zapatos para comprarnos a mi hermano y a mí, spikes y guantes para jugar.”
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Así que la explicación viene dada desde su cuna. Y aunque mucho le queda por mejorar a la ofensiva, pues solo en 20 turnos ha pegado 3 incogibles, no caben dudas de sus dotes para ir a más de un espacio dentro y fuera del infield.
Curiosamente en el Derby del Subway contra los Metropolitanos de Nueva York no se comunicó bien con el right fielder y cayó la bola al suelo tras un fly inofensivo. Costó carrera pues luego D.Vogelbach pegaría jonrón.
Sin embargo nada opaca la marca de Oswaldo Cabrera a quien le queda mucho por escribir.
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De momento podemos decir que: inició en la tercera base, al otro día fue al campo corto, el tercer desafío le vio en el jardín derecho, la cuarta jornada estuvo de vuelta como SS y en la antesala, y en su más reciente partido estuvo presente en la custodia de la intermedia.
¿Lo veremos hoy como lanzador emergente si se abre el marcador?
Veamos algunas de sus jugadas defensivas:
