Puerto Rico es uno de los países de mayor tradición en el baloncesto latinoamericano y Mundial. Con una gran histora, los boricuas quieren regresar a esa élite donde supieron estar alguna vez, sobre todo en la segunda mitad del siglo XX y principios de este milenio.
En las últimas dos décadas, Puerto Rico sufrió un declive, pues pasó de ser un recurrente asistente a los Juegos Olímpicos a un conjunto que le costaba estar en la magna cita del deporte. Después de brillar en Atenas 2004, donde derrotó al Dream Team de USA con sus jugadores NBA, nunca más un representativo boricua clasificó a este certamen.
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Una larga espera de 20 años que podría terminar este 7 de julio, en San Juan. Allí una multitud esperaba que los suyos derrotaran a Lituania en el Preolímpico de Baloncesto para estar en París 2024. Al frente estaba una potencia del baloncesto como lo es Lituania, con el estelar NBA, Domantas Sabonis, entre sus principales figuras.
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La larga espera de 20 años llegó a su fin para Puerto Rico
Pero Puerto Rico se mostró inspirado desde el salto entre dos. Con la participación destacada del jugador de New Orleans Pelicans, José Alvarado, se fueron al descanso con una ventaja de cuatro puntos (39-35). Sin embargo, empezado el tercer cuarto apareció la figura del cubano nacionalizado, Ismael Romero, quien se creció ante los internos de Lituania y eso fue clave para que el local estire la ventaja a 14 (62-48) con solo 10 minutos por jugar.
Los puertorriqueños ahora debían manejar los tiempos y mantener la ventaja. Así fue como, pese a un leve intento por remontar de los europeos, no hubo manera de que la victoria no fuera del anfitrión, que se impuso con marcador de 79-68. Un categórico resultado que exhibió las virtudes del elenco caribeño.
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Cubano Ismael Romero ayudó en defensa
El héroe de la jornada fue Alvarado, pues lideró la ofensiva con 23 unidades, solo Tremont Waters se acercó con 16 puntos. Mientras que fue clave la defensa de los internos, sobre todo Romero, quien ayudó a limitar a Domantas Sabonis, que solo anotó 10 unidades. Algo bajo para alguien acostumbrado a registrar triples-dobles con Sacramento.
Fueron 18 minutos los que estuvo sobre el tabloncillo el cubano. En ese período sumó dos puntos, cuatro rebotes y un bloqueo. Pero su labor fue más allá de lo meramente estadístico, ya que influyó en la poca productividad de los hombres grandes de Lituania.
Puerto Rico compartirá ahora grupo en los Juegos Olímpicos de París con dos potencias de la talla de Estados Unidos y Serbia, además del debutante Sudán del Sur.
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