Por Juan Páez
El Entrenamiento Primaveral de los Nacionales de Washington tendrá un motivo para mantener pendientes a todos los aficionados de la pelota cubana en la Gran Carpa. Yadiel Hernández recibe con brazos abiertos a Yasmany Tomás, pero una vez comience la acción, es probable que ambos peleen por el mismo puesto en el equipo grande de los capitalinos para iniciar la ronda regular 2021 de las Grandes Ligas.
Aunque quizás no por mucho, Hernández parece tener cierta ventaja sobre Tomás cuando se miran sus circunstancias. Es el hombre de la casa, el que ha estado con los capitalinos desde octubre de 2016, jugó con el equipo grande en 2020, es miembro del roster de 40 hombres y es quien no ha parado de batear en Ligas Menores. En varias ocasiones el cuerpo técnico y la gerencia de los Nacionales han dicho que le darán la oportunidad a Yadiel de ganarse un puesto por todo lo que ha hecho en las filiales de la organización. Como punto adicional, ofrece una mejor defensa que Tomás en los jardines.
El pelotero de 33 años de edad solo tiene 12 juegos de experiencia en el big show, todos en 2020. En 28 apariciones al plato, dejó una línea de .192/.214/.423 y conectó cinco hits, con tres dobles y un cuadrangular, además de seis remolcadas.
Pero es el Tanque quien tiene el mejor y más extenso historial en las Mayores, al menos a la ofensiva. Si bien es cierto que los Diamondbacks de Arizona lo relegaron a las Menores y no le hicieron hueco en el equipo grande desde que se lesionó en 2017, el slugger isleño sabe lo que es tener una temporada de 30 dobles, 30 jonrones y 80 impulsadas, guarismos que alcanzó en 2016 con los desérticos.
Y aunque Tomás, tres años menor (30) que Hernández (33), solo apareció en cuatro desafíos entre mediados del 2017 y el 2020 (todos en 2019), fue una máquina de bateo con el Reno Aces, sucursal Triple A de Arizona. De hecho, en 2019 participó en 102 compromisos, dio 122 hits, sacó 29 pelotas del parque, fabricó 82 anotaciones y registró unas frecuencias de .301/.341/.590 en 431 viajes totales al plato. Pero si una verdad ronda su presenta, es que podría no tener muchas oportunidades más en las Mayores, algo que en pocas palabras lo obliga a dejar una rápida buena impresión con Washington cuando reciba el chance.
A estas alturas parece improbable que puedan ver mucha acción como titulares, puesto que los Nacionales firmaron recientemente a Kyle Schwarber para que sea su patrullero izquierdo, tienen a Víctor Robles en la pradera central y al inamovible Juan Soto en el right field. A eso se le suma que es casi un hecho que no habrá bateador designado este año en la Liga Nacional y que, por si fuera poco, Josh Harrison y Andrew Stevenson también entrarán en la pugna por un cupo en el roster.
El puesto por el que pelearían en el Spring Training es el de bateador emergente. Y eso ciertamente podría poner la carrera más pareja, con diferentes ventajas para cada uno. Por el lado de Hernández, aparte de todo lo mencionado, brinda mayor versatilidad para ocupar cualquiera de los jardines, mientras que Tomás, quien firmó pacto de Ligas Menores con invitación al ST, puede ser el toletero derecho de poder que aparentemente necesitan al menos para salir de la banca.
Sea lo que sea que pase de aquí al comienzo de los Entrenamientos Primaverales, la batalla entre Tomás y Hernández promete ser una de las historias más interesantes de la primavera en cuanto a la armada cubana, de cara a la ronda regular 2021 de las Grandes Ligas.