Por Damián Abreu
La solidez de Cionel Pérez como un relevista de puntería dentro de las Grandes Ligas volvió a ponerse a prueba durante la jornada del pasado miércoles en el desafío que enfrentó a los Orioles de Baltimore contra los Azulejos de Toronto, con los primeros como anfitriones del encuentro en el Oriole Park de Camden Yard.
En esta ocasión, el lanzador yumurino le tocó venir en rescate de su compatriota, el avileño Yennier Cano, quien tras haber dominado cómodamente en dos entradas de actuación abrió el inning de la suerte recibiendo un indiscutible que motivó que la dirección de los Orioles recurriera a los servicios de Cionel Pérez para preservar el empate en el marcador.
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Inmediatamente el zurdo cubano se puso en funciones, con hombre en la inicial y marcador de una carrera por una. Comenzaría propinando ponche al bateador Jackie Bradley Jr, sin embargo, no sería una salida tranquila para Cionel. El siguiente bateador le conectó rodado a la lomita y en su propio intento por iniciar el doble play y retirar la entrada, realizó un tiro desviado a la intermedia que provocó el avance del corredor hacia la antesala y la entrada en circulación de otro efectivo de los Azulejos.
A continuación, Pérez permitió un indiscutible del infielder Otto López con el cual se fueron arriba los Azulejos en el desafío. Tocaba el turno entonces para uno de los buenos bateadores de la escuadra de Toronto, el camarero Raimel Tapia, quien encontró hombres en posición anotadora. Fue entonces cuando el lanzador antillano volvió a poner en práctica su efectividad para dominar con ponche a Tapia y al siguiente bateador en la tanda el peligroso Teoscar Hernández.
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En conclusión, la actuación del cubano se saldó con tres ponches en la entrada que lanzó, pero a pesar de ello no pudo cumplir el objetivo para el cual fue traído al montículo que era mantener la ventaja de su equipo. El partido terminó con victoria para los de Toronto de cinco carreras por una en el partido que cerraba el calendario regular para ambas escuadras.
Esta ha sido la temporada consagratoria sin duda alguna para el pitcher matancero en las Grandes Ligas, pues se mostró como un relevista de nivel dentro del circuito. Sus números durante toda la campaña fueron de los más importantes en la difícil temporada de los de Baltimore y de los mejores entre los relevistas del campeonato. Sus estadísticas definitivas en sus 66 salidas en el torneo fueron: 7JG / 1JP/ 1JS / 25 Holds/ 1.40 PCL/ 1.16 WHIP / 220AVG
