Por Alexander García
Habían dicho que las 15 000 entradas estaban vendidas en el Denis Martínez para ver a Cuba el juego del viernes último, habían dicho eso pero dicen tantas cosas, intentan tantas cosas que cuando el choque empezó, esa sensación de vacío en las gradas, con esos claros inmensos … no sorprendía a nadie.
Tal parece que fue parte del show esto de dar esa promoción nefasta sobre la asistencia al estadio y entonces el tedio vuelve a invadirnos hasta el punto que pensar o deducir algo se vuelve imposible.
El teatro del absurdo, la parodia sin fin… ¿Qué es esto?
Una niebla densa sigue rodeando a la pelota cubana: en Harlem exigen a la Federación que lleve un elenco competitivo, Higinio Vélez veta opción de tope con norteamericanos y en Nicaragua, un magro empate a tres carreras dejan a uno con ganas de gritar, de mandar al carajo todo…acaso, ¿se puede esperar algo jugando de este modo para Cuba?, fallando con hombres en base, con pérfidos errores como los de Arrebarruena, bueno, saquemos conclusiones que se decantan solas…
Más aún, este elenco al cual enfrentamos no debe estar muy lejano del que vaya al preolímpico de Arizona y sin dudas está por debajo de Colombia, de Venezuela y de Canadá
… Entonces…
La parafernalia crece por segundos y Arrebarruena se reivindica contra el sub 23, de 6-6; todo es elogio y más por la doble victoria de este sábado ante la joven escuadra nicaragüense. El domingo, para rematar, fue el héroe del triunfo matancero.
Las cosas se empiezan a exagerar sin medida y no es que el éxito sepa mal, siempre la victoria es bienvenida pero sobredimensionar el contexto, al rival, no es para tanto señores… ya alertábamos de esto en un artículo anterior pero la propaganda hace y deshace a su antojo.
Resulta innegable que este equipo ha dejado mejor imagen, respecto al elenco que jugó el año anterior el duelo contra la selección de mayores de Nicaragua, pero un seleccionado de juveniles no es medidor bajo ningún argumento.
El equipo matancero ha bateado, ha mostrado temple y ganas en los juegos amen de los regalitos de Arrebarruena en el encuentro inaugural pero de ahí a montar toda esa burda campaña de positivismo absurdo va mucho trecho… cada cosa a su lugar; esto es un tope, lo otro de marzo es un duro reto… uno casi imposible.
Nos vemos a la vuelta.