La tarde del miércoles 19 de junio, se llevó a cabo el último de la serie entre Detroit Tigers y Atlanta Braves. En medio de la inauguración del desafío, el inicialista cubano, Andy Ibáñez, mostró su gran alcance defensivo tras evitar al menos un par de anotaciones por un complicado rebote de la pelota.
Ha sido una complicada temporada para el equipo de Tigres de Detroit, quienes poseen marca de 34 victorias por 39 derrotas, para ocupar el cuarto puesto en el Centro de la Liga Americana, a 11 juegos y medio de los líderes Cleveland Guardians (44-26).
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A pesar de ello, el infielder antillano ha visto con claridad la esférica en sus últimos siete encuentros. En ese lapso presentó una línea ofensiva de .316/.350/.421, con dos dobles, tres remolques y cuatro anotadas, resultado de seis inatrapables en 20 apariciones al plato de manera oficial. Aunque en esta oportunidad, destacó a la defensiva en el último encuentro que se efectuó en el Truist Park.
Andy Ibáñez lució magistral joya defensiva
Pero antes, es importante mencionar que el lanzador Tarik Skubal permitió un sencillo de Ozzie Albies, luego le regaló la base por bolas a Marcell Ozuna y le propinó un pelotazo a Austin Riley. Con ello, congestionó las almohadillas después de dos out en la conclusión del primer inning.
Posteriormente, Adam Duvall consumió su primer turno de la tarde ante los envíos del serpentinero visitante. Apenas visualizó dos pitcheos, ajustándose a un cambio de velocidad que internó por los lados de las praderas cortas. El defensor de dicha posición se alejó para tener un mejor balance a la hora de tirarla a la primera base. Midió exactamente donde estaba su compañero para ejecutar la jugada.
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La pelota tomó un rebote sobre la tierra y en cuestiones de segundos, Andy Ibáñez analizó hacia donde se dirigía. Sin perder el contacto con el cojín, se estiró hacia el derecho para tomarla de manera sensacional con el que fabricó el tercer out del episodio. La jugada en consecuencia tuvo gran relevancia, puesto que, de no tener control de ella, iba a entrar al menos las dos primeras carreras para Atlanta Braves.
Andy Ibáñez se convirtió en un importante jugador de utilidad para el manager A.J. Hinch, tras las lesiones de Gio Urshela, Javier Báez y la asignación a Ligas Menores de Spencer Torkelson. Ha visto acción en ocho oportunidades en la antesala, cinco como primera base (contando el juego en curso) y dos en el campocorto, respectivamente.
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