Por Alexander García
A simple vista, en teoría, viéndolo desde una perspectiva superficial, parece una decisión correcta, un movimiento sabio pero un leve sondeo nos muestra que más bien es otra bola de trapo de la Federación, pues a pesar de lo apretado del tiempo en función de terminar la Serie 60 para centrar la mira en el calendario internacional, sobre todo el Preolímpico de Florida, a pesar de eso, para elegir al nuevo director de la selección cubana, la Comisión Nacional podía esperar unos días más, hasta que terminara la final y no desechar desde ya a la figura de Carlos Martí.
Si a comienzos de abril, la historia recoge que los Alazanes de Granma son los nuevos campeones del béisbol cubano. ¿Cómo quedara la figura de Carlos Martí? ¿Qué rol jugará?
Ahora mismo sigo sin entender y este enroque desesperado no da buena imagen al respecto, pues cuando todos abogaban por la lógica respecto al tema del nuevo director, llega este cubo de agua fría para dar otra vuelta de tuerca y rememorar épocas pasadas que nada bueno le aportó a la pelota criolla.
El tema no ha trascendido en los medios oficiales por los mismos argumentos de siempre y a pesar del silencio, adquiere más connotación con los pasos de los días, pues en un contexto donde todo apunta hacia el buen trabajo, hacia el hacer bien las cosas y ponerle un tono más serio al hecho de levantar la imagen de la pelota cubana; sucesos asi, vuelven a empañarlo todo.
En este punto, nadie sabe a ciencia cierta cuales son los criterios a tener en cuenta para elegir al director, cuando uno piensa que es por resultados, luego vienen con el pretexto que es por estrategia y así van cambiando hasta perder el hilo racional de las cosas.
Creo en lo personal que Armando Ferrer lo tiene todo consigo para hacer un buen trabajo, como hace ratos no pasa; el matancero tiene aval, prestigio y mucho conocimiento pero Carlos Martí e incluso el mismo Pablo Civil, de acuerdo a la óptica con la que se mire la elección también los tienen; pues en el caso de Carlos Martí, además de sus dos campeonatos y las Series del Caribe a las que asistió, está el Clásico Mundial; por su parte Civil, tiene la corona de la Serie 58 y la plata de la Serie del Caribe de Panamá.
Todo iba bien, iba bien hasta ahora, pero hay un tono medio turbio en el ambiente que le da categoría de metedura de pata a este asunto, más cuando los pasos que se dan son a profesionalizar cada día mas a la Federación y a la Liga Cubana.
Puede incluso que existan los argumentos, yo no los conozco, nadie dice nada e incluso conociéndolos no los podría entender, pues la lógica que veo respecto al tema del nuevo director es que debía salir del equipo campeón de esta Serie 60.
Una vez más, el tiempo dirá.
Nos vemos a la vuelta.