Por Jesús Pérez Vichot (Chuchi)
El dominicano Albert Pujols le regaló un auto a un entrenador de Los Ángeles Dodgers esta temporada para mostrarle su gratitud. Pujols es uno de los «chicos buenos» del béisbol, lo demuestra año tras año con su comportamiento ejemplar dentro y fuera del terreno de juego.
Los Dodgers adquirieron al futuro miembro del Salón de la Fama, la temporada pasada y, como era de esperar, se convirtió instantáneamente en el líder del camerino. Tio Albert rápidamente desarrolló excelentes relaciones con sus nuevos compañeros de equipo. También estaba feliz de reunirse con un viejo amigo de sus días en los Ángeles: Dino Ebel. Ebel solía conducir hasta Newport Beach, donde vive Pujols, para ayudarlo a entrenar.
«Cuando él llamaba, yo aparecía. Dondequiera que él quisiera que estuviera, yo estaba allí. Así fuera para batear roletazos o lanzarle en una práctica de bateo durante una hora, lo hacía porque me encanta hacerlo. Lo amo porque es una gran persona. Nuestra relación siempre fue fuerte y continúa siéndolo”.
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Pujols quería pagarle a Ebel por todo su arduo trabajo para ayudar al tres veces Jugador Más Valioso de la Liga Nacional a mantenerse en forma. Ebel se detuvo en su casa alrededor de la medianoche después de un partido en casa de los Dodgers la temporada pasada. Su esposa y sus dos hijos estaban afuera para alertarlo de que la puerta del garaje no funcionaba.
Después de unos minutos de intentar resolver el problema, el hijo de Ebel abrió la puerta del garaje que sí funcionó. “Abrí la puerta del garaje y había un Corvette convertible Stingray Dodger Blue 2021″. Pujols nunca dijo una palabra sobre el auto a pesar de que él y Ebel estuvieron juntos la mayor parte del día en el estadio. Cuando Ebel llamó a Pujols para agradecerle, el legendario toletero fue breve y dulce. “Gracias por todo lo que has hecho. Este es un regalo de mí para ti, mi amigo”.