Por Guillermo Sánchez
Una de las mejores cosas que ha sucedido en el campamento de Angeles Dodgers durante este Spring Training sin duda es despertar en todos los aspectos del cubano Miguel Vargas.
Fue tan positiva la actuación del infielder que incluso cuando no podía mover el bate por su lesión en la mano derecha dejó un OBP de .500.
Recordemos que Miguel Vargas estuvo los primeros encuentros de los entrenamientos sin poder hacer tan siquiera un Swing Completo, esto debido a una lesión sufrida en el dedo meñique derecho. El mánager de Angeles Dodgers, Dave Roberts, consideró que debía trabajar su defensa, ya que estaba cambiando a la segunda base.
El resguardo de la intermedia fue brillante y la coordinación con el campocorto venezolano Miguel Vargas fue casi instantánea, pero no quedó ahí.
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Apenas tuvo luz verde para batear el cubano no paró de conectar y poner la bola en juego para enviar un mensaje super claro: «Estoy listo para la fiesta grande».
Desde que recibió la autorización Miguel Vargas conectó de hit en nueve de los 14 encuentros que jugó, ligó de 36-10 y dejó una línea ofensiva de .250/.389/.775 con jonrón, dos impulsadas y ocho anotadas.
De hecho, los últimos cuatro juegos tuvo al menos un indiscutible, de hecho en ese periodo se fue de 11-4.
Todo eso le puso la tarea fácil al dirigente de Angeles Dodgers al momento de completar no solo el roster sino también el lineup titular del MLB Opening Day 2023.