Por Robiel Vega/@robielcuba87
Muchos se sorprendieron cuando la organización de los Nacionales de Washington pagó la impresionante cifra de $4,925,000 por firmar a Cristhian Vaquero, más aún cuando esa cifra representaba el 95.1 % de los 5.2 millones del presupuesto de firmas internacionales con el que contaba la franquicia. Pero lo cierto es que los especialistas concuerdan en que el joven cubano de 17 años vale cada centavo.
Ya desde su llegada comenzó a ser comparado con grandes de la historia del equipo capitalino, como Juan Soto, “Soto no tenía ni de cerca las herramientas que tiene este chico”, dijo Johnny DiPuglia, Director de Operaciones de la franquicia, al ser interrogado sobre si el fenómeno dominicano Juan Soto tenía las mismas condiciones de el cubano. «… no ves muchachos de 6 pies 3 pulgadas, 190 lb, bateador ambidiestro, perfil de jardín central…«, afirmaba admirado el directivo.
El talento del cubano no ha pasado desapercibido por los medios más especializados; el sitio mlb.com realizó un listado con los jóvenes valores de cada una de las organizaciones de Grandes Ligas; llamados a ser los mejores de cara al año 2024 y a formar parte de la lista de los 100 mejores prospectos de MLB Pipeline, entre ellos y comandando a los Nats, está Cristhian Vaquero, confirmando su nombramiento como el prospecto internacional No. 2 en el presente periodo de firmas internacionales.
Vaquero se convierte, instantáneamente, en uno de los jugadores más dinámicos en el sistema de los Nacionales; como jardinero central de gran velocidad y potencia. Para mejorar sus potencialidades, aprendió a batear a la derecha, luego de ser exclusivamente zurdo durante todo su desarrollo. De mantener este estatus de ambidiestro y perfeccionarlo, tiene el techo para ser el mejor prospecto de Washington en dos años.
Todavía le resta a Cristhian Vaquero un largo camino por delante, pero tiene a su favor la entrega y la disciplina con la que enfrenta cada día. Es un joven que no pierde el enfoque y está determinado a triunfar al más alto nivel del béisbol. Si a todo le sumamos sus excepcionales condiciones físicas para el béisbol, podemos tener la casi certeza de que su nombre sonará como la futura estrella cubana en las Grandes Ligas.