«Me obligaron a hacerlo», CONFESÓ el Ohtani del beisbol cubano

El beisbol cubano cuenta con historias que pasan desapercibidas

El beisbol cubano cuenta con historias que pasan desapercibidas, pero que remueven las pasiones cuando son expuestas a la luz pública. Tal es el caso del pelotero Jorge Enrique Alomá.

La figura de Industriales logró hacerse viral hace pocos días, cuando actuó como lanzador en la II Liga Élite. El jugador de cuadro trabajó par de veces como monticulista, sin permitir carreras limpias. Esto despertó un revuelo mediático, pues aunque en otras ligas es habitual este proceder, en Cuba es algo muy raro.

Pero, la sorpresa embargó a todos recientemente debido a declaraciones dadas por el atleta. Jorge Enrique Alomá hizo referencia a un capítulo de su vida y denunció una absurda burocracia. Lo expuesto por el deportista se torna increíble.

Recordemos que Alomá se desempeñó en el equipo de los Cazadores durante dos campañas nacionales. Las temporadas de 2017-2018 y 2018-2019 fueron testigos de los mencionados sucesos. En dicho conjunto, el defensor del cuadro logró estadísticas de lujo que lo colocaron en los equipos nacionales. En la Serie Nacional 2019-2020 Jorge Enrique volvió a vestir el traje azul.

El beisbol cubano y las constantes polémicas

«Lo mío fue diferente. Yo estaba en el equipo Cuba. Lo mío fue por problemas entre las provincias. Yo nunca me quise ir para La Habana. Pero ya tenía una carta que se vencía a los dos años. Me obligaron a irme prácticamente«, señaló.

El beisbolista confesó que la relación con los de Artemisa fue la mejor y que sintió mucho en su momento el fallecimiento de Danny Valdespino, quien fuera su manager en la mencionada novena.

Jorge Enrique Alomá mencionó que ahora está en Industriales y confía en que podrán tener un buen torneo. El entrevistado piensa que lograrán llegar hasta las instancias de playoffs, pese a los malos momentos que han pasado.

Lo sucedido ha plasmado el asombro en el rostro de muchos. Es cierto que los contratos entre provincias es algo regulado en el beisbol cubano, pero varias preguntas se interponen. ¿El pelotero no tiene voz en el asunto? ¿No es posible hacer excepciones?

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