Por José Alejandro Rodríguez Zas
En la mañana de este martes 24 de agosto, tres días después de la inobjetable victoria de Yordenis Ugás sobre Manny Pacquiao, uno de los momentos cumbres del boxeo cubano en la historia del pugilismo universal que llenó de orgullo a millones de cubanos dentro y fuera de la Isla, la prensa oficialista cubana se pronunció sobre el histórico suceso, con un discurso muy poco logrado, como es costumbre.
En una nota publicada en el sitio digital JIT, la cara periodística del deporte cubano ensució la excelente demostración de nuestro boxeador Yordenis Ugás, quien ha sido admirado dentro y fuera del ring, por los verdaderos cubanos, esos que son libres de pensar y decir lo que tienen en sus corazones, sin mordazas que limiten sus ideas o guiones prestablecidos en viejos libros de historia.
La nota comienza destacando, entre dientes, la labor de Ugás en su pelea contra Pacquiao, una leyenda viva del boxeo mundial, alcanzando una importante victoria en su carrera deportiva por votación unánime, la cual le permitió retener su título de supercampeón welter de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB).
Sin embargo, según JIT, “los conocedores del boxeo aplauden la victoria deportiva de Ugás, pero millones de cubanos lamentan su desmemoria y claro servilismo durante el festejo”, en clara manipulación de lo que realmente sucedió sobre el ring y total desconocimiento del pensamiento del boxeador.
Sucede que, para la dictadura cubana, sólo aquellos que griten su vieja consigna de Patria o Muerte son los hombres de respeto, como Julio Cesar La Cruz, quien lo hizo a viva voz en el ring olímpico, sin explicarle al mundo que esas palabras solo representan las dos opciones que te da el desgobierno cubano: “o estás con ellos, o ya sabes lo que te toca”.
“Todos los cubanos estaban viendo esto. Los cubanos salieron masivamente a apoyarme. ¡Patria y Vida! ¡Patria y Vida!”, gritó Yordenis Ugás, aún sobre el encerado, a las cámaras de la televisión tras ser declarado ganador y agregó: “¡Patria o Muerte NO, Patria y Vida!”.
Esas palabras, que retumbaron en Estados Unidos, Cuba, Latinoamérica y el mundo, son un dolor de cabeza para los siervos del desgobierno cubano, quienes no conciben que en un escenario así se haga uso de la libertad de expresión para dañar su caduca imagen.
Pero lo más preocupante aquí es lo siguiente: ¿acaso gritar ¡Patria y Vida! es muestra de algún “servilismo”? ¿A quién? ¿No será acaso que, el Patria o Muerte, es un mejor ejemplo de “servilismo” a un sistema decadente, ineficaz y precario, ya olvidado en las cenizas de la historia?
“Se ha encumbrado este santiaguero formado al amparo de un sistema deportivo que le permitió pulirse desde la base hasta instalarse en la élite nacional y ser llamado al concentrado mayor de la Isla”, indicó la nota de JIT, antes de enumerar los lauros conseguidos por Ugás como boxeador amateur.
“Desde sus filas se proclamó campeón mundial en Mianyang 2005, fue medallista de bronce olímpico en Beijing 2008 e incursionó en otros eventos”, agregó, antes de soltar el veneno: “hasta que apostó por otros sueños.”
El propio Yordenis Ugás, dijo hace solo unos días en su cuenta de Twitter:
“Vengo de un país comunista donde ni siquiera podía convertirme en profesional. Me convertí en un hombre libre, me convertí en un campeón. Tengo una hermosa prometida. Y he enorgullecido a mamá, he trabajado duro y con la ayuda de Dios he hecho realidad los sueños”. Nada más que agregar.
Continúa JIT en su nota:
“Ese giro ha ido más allá de su proyección atlética, hasta mostrarse políticamente radicalizado junto a quienes desean una Cuba rendida a los designios del imperio estadounidense.”
“Sus publicaciones y declaraciones tras el triunfo no dejan dudas: aquel muchacho humilde, querido y hasta mimado por sus entrenadores, ahora respalda a claros agresores de la patria e hilvana discursos poco logrados, lejanos de la claridad de sus acciones entre las cuerdas.”
Y nuevamente nos preguntamos: ¿Es un delito estar políticamente radicalizado? ¿Acaso no tiene derecho Ugás, como hombre libre, de estar en contra de un gobierno que aplasta los derechos de sus compatriotas?
Evidentemente, los redactores de la nota de JIT solo han visto la parte de la historia que les conviene, o los megabytes de los paquetes de internet no les alcanzan para escuchar y ver todas las entrevistas dadas por Ugas, antes y después de la pelea.
¿En qué momento Yordenis Ugás se ha manifestado estar rendido a los “designios del imperio estadounidense”? O sea, ¿estar en contra del gobierno de Cuba y gritar ¡Patria y Vida! ya es muestra suficiente de ello? ¿Acaso realmente le importa Cuba al gobierno de los Estados Unidos? Hay un patrón de pensamiento enfermizo en el oficialismo cubano que, evidentemente, les está afectando y quitando el sueño.
«Todos conocen mi historia sobre cómo vine a Estados Unidos para seguir mis sueños de convertirme en campeón mundial, y ahora es el momento de sellar mi legado con una victoria, como uno de los mejores luchadores cubanos que jamás se haya puesto un par de guantes”, escribió Ugás en sus redes sociales.
Según explica JIT, el boxeador cubano “no reconoce ni agradece su formación acá. Así lo prefiere.” De esto es mejor ni comentar, pues la mejor muestra de ello es que, su entrador principal, Ismael Salas, es cubano y todo su equipo de trabajo y compañeros de enteramientos, son pugilistas cubanos. Eso sí, hombres libres.
Continúa la nota de JIT:
“Y aunque toca respetar su posicionamiento ideológico y político, cuesta entender que difame de sus excompañeros de equipo e intente ejercer un liderazgo al amparo de quienes arrecian los ataques contra el país que le vio nacer.”
No les queda otro remedio que tragar en seco y respetar sus ideas, pero ojo, “difamar de sus compañeros” en una falta de respeto grave a la persona de Yordenis Ugás.
“Descarado, arrastrado y sumiso. En pleno 2021 conociendo tantas cosas como las que conocen ya hablando así. Una vergüenza y ese equipo no me representa”, dijo Ugás en su perfil de Twitter. ¿Es eso difamación o su postura?
Y si, Cuba lo vio nacer, pero otros lugares le han permitido crecer y ser libre, ser feliz, que es algo imprescindible para la vida de un ser humano.
“Le hizo feliz escalar al ring al compás de un tema musical devenido himno de los enemigos.”, agregó JIT. “Y repitió después la consigna enarbolada por estos, que intenta derribar el sentido patriótico de aquella de Fidel que nos ha acompañado por décadas en la defensa del país.”
Nada que agregar, toda la impotencia y frustración del desgobierno cubano y el periodismo oficialista servil a sus precarios intereses, perfectamente resumido en una frase “muy poco lograda”, como ellos mismos expresan.
El cierre de la nota de JIT se los dejamos a ustedes, porque no nos hacemos ecos de tan trillados argumentos. Solo acudimos a las propias palabras de Ugás en su perfil de Facebook.
“Esta pelea contra uno de los mejores boxeadores de la historia va dedicada a todos los hombres y mujeres que luchan por una Cuba Libre. A todos los presos políticos. A todos los presos del 7/11”.
“Soy un peleador no solo dentro del cuadrilátero, sino que fuera también lucho por la libertad de mi gente. Eso es lo más importante para mí. Espero que todos los que luchan por la libertad en Cuba estén a salvo y sepan que lucharé con el corazón también por ellos el sábado 21 de agosto. Amo a mi país y quiero dedicar esta lucha a todos los hombres y mujeres que luchan por la libertad”, agregó.
Desde aquí solo reiteramos: Yordenis Ugás derrotó a la leyenda del boxeo Manny Pacquiao de manera convincente ¡Felicidades Campeón! ¡Eres un orgullo para millones de cubanos dentro y fuera de la Isla! ¡Patria y Vida!