Raisel Iglesias va por la reivindicación en 2020

Por Juan Páez

Es cierto que Raisel Iglesias no tuvo una temporada totalmente mala en 2019 en las Grandes Ligas. Si se ve su actuación como un todo, hay algunos puntos altos, como los 34 salvados para un imponer un tope personal o los 12.0 ponches que consiguió en promedio por cada 9.0 entradas lanzadas, por ejemplo. Pero también es una realidad que su campaña estuvo llena de altibajos y que su dominio no fue el mismo de los dos años anteriores con los Rojos de Cincinnati.

En 2020, el derecho cubano está ante un escenario muy importante para él. Ahora con un conjunto renovado y con más posibilidades de competir en la División Central de la Liga Nacional, Raisel deberá reacomodar su paso para mantenerse inamovible del puesto de cerrador en un equipo que entrará, de manera más seria, en la contienda por asistir a postemporada por primera vez desde 2013, cuando perdieron el juego por el Wild Card ante los Piratas de Pittsburgh.

En la más reciente zafra de la Gran Carpa, el antillano terminó con récord de tres victorias, 12 derrotas y efectividad de 4.16 en 68 presentaciones. Tiró 67.0 episodios, en los que permitió 61 imparables, 31 carreras limpias y 12 estacazos de vuelta completa.

Su balance incluyó 21 bases por bolas y 89 contrarios retirados por la vía del tercer strike. Su WHIP terminó en 1.22, una cifra que parece amenazante para un apagafuegos.

El mánager David Bell, urgido por traer triunfos a su divisa, podría darles la oportunidad a los efectivos Michael Lorenzen y Amir Garrett si la inconsistencia de Raisel Iglesias persiste.

Por eso no puede darse el lujo de fallar tan a menudo, justo como le ocurrió en 2019, cuando terminó con seis oportunidades desperdiciadas.

Problemas

Aunque Iglesias, a quien los rivales pasaron de batearle para .197 de average en 2018 a .238 en 2019, está obligado a ser más efectivo en la venidera ronda regular si quiere mantenerse como el hombre del noveno inning para los Rojos, podría verse perjudicado por el tipo lanzador en el que aparentemente se está convirtiendo pese a que en el torneo pasado ponchó más que nunca y dio pocos pasaportes.

El diestro, quien cumple 30 años este sábado, ha cambiado roletazos por elevados y en un parque como el Great American Ball Park, donde la pelota vuela, eso podría ser nocivo para su rendimiento.

Su porcentaje de pelotas por el suelo ha bajado notablemente: de 42.2 % en 2017 a 38.5 % en 2018 y a 29.9 % en 2019, mientras que su porcentaje de flies pasó de 32.4 % y 35.2 % respectivamente en 2017 y 2018 a 43.9 % en la última temporada de las Mayores.

Gracias a ello, su relación de jonrones por 9.0 innings fue la peor de su trayectoria (1.61).

Si bien el derecho impuso un nuevo tope personal en rescates, con 34, terminó con la peor efectividad de su carrera (4.16) y desperdició seis oportunidades de salvar.

Su WHIP fue el más elevado de su trayectoria, un 1.22 que resulta peligroso para un cerrador. A su vez, le pegaron 8.2 hits por cada 9.0 entradas lanzadas, su peor relación en esa casilla desde que juega en la Gran Carpa.

Ese dato se torna aun menos alentador cuando se advierte que el porcentaje de Raisel Iglesias en cuanto a conexiones fuertes fue de 24.2 % en 2017 a un 34.8 % en 2018 y a un 38.9 % en la zafra anterior.

Iglesias todavía es de los mejores brazos en el equipo de los Rojos y aún está a tiempo de revertir su 2019 y seguir siendo el taponero del equipo de cara a una nueva etapa, pero debe hacer ajustes si quiere ser el hombre que preserve las ventajas de un club que ahora apunta a octubre.

Estadísticas de Raisel Iglesias en las Grandes Ligas en 2019:

Año Eq G P ERA J SV IP H R ER HR BB SO WHIP
2019 CIN 3 12 4.16 68 34 67.0 61 31 31 12 21 89 1.224

Scroll al inicio