Aliet Arzola Lima
Aroldis Chapman solo pudo dominar a uno de los cuatro bateadores que enfrentó este domingo en el duelo entre Yankees y White Sox. El zurdo holguinero se apuntó su segunda derrota en un lapso de ocho días y, por quinto duelo consecutivo, permitió al menos una carrera, su peor racha desde que debutó en Grandes Ligas hace 12 años.
Luego de esta salida dudosa, el cerrador de los Yankees entregó la bola al manager Aaron Boone y caminó rumbo a las duchas con algo más que la derrota a cuestas. Resulta que Chapman afronta molestias en el tendón de Aquiles, por lo que ha sido tratado durante las dos últimas semanas, según explicó el propio relevista.
Teniendo esto en cuenta, el mismo domingo en la noche fue sometido a una resonancia magnética para determinar si había empeorado la lesión. Afortunadamente, el resultado de la prueba fue negativo, lo cual significa que el cubano no tiene desgarro o rotura, sino una inflamación que le provoca tendinitis.
No obstante, el alto mando de los Bombarderos del Bronx prefiere actuar con cautela y no descarta que Chapman sea incluido en la lista de lesionados hasta tanto se recupere totalmente.
«Creo que la lista de lesionados todavía está en juego. Simplemente no queremos apresurarnos. Veremos qué tenemos», dijo Boone en declaraciones que recoge ESPN.
Esta situación le restará tiempo de juego al cubano, quien difícilmente podrá aspirar a completar su primera temporada de 40 salvados. Además, parece poco probable que logre los 26 rescates que le faltan para meterse en el Top-15 de los lanzadores con más salvamentos en la historia de MLB. Ahora mismo Chapman tiene 315 y ocupa el puesto 24 de todos los tiempos.
A pesar de las molestias, Chapman descartó ante los medios que su rendimiento de los últimos partidos haya estado condicionado. “Cuando estás lidiando con cosas, a veces puede afectarte, pero al final del día, no es la razón de los últimos resultados. En realidad, las cosas no han funcionado como yo quisiera”, aseguró el veloz zurdo.
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Durante los primeros 12 partidos de la temporada, el holguinero no permitió carreras, solo concedió cuatro imparables, retiró a 11 bateadores por la vía de los strikes y los contrarios le promediaron .111/.256/.139. Sin embargo, el panorama ha cambiado radicalmente en sus últimas cinco presentaciones, en las que ha aceptado nueve hits (dos jonrones), seis anotaciones, con un OPS rival de 1.469.
Debemos añadir otro dato preocupante: los promedios de velocidad de Chapman con la recta de cuatro costuras (96.8), la sinker (100.2) y la slider (84.2) son, por mucho, los más bajos de su carrera. En gran medida, esto ha provocado que los rivales logren contactos más efectivos, como lo evidencia el hecho de que el 39% de los batazos permitidos por el zurdo son considerados Hard Hit (95+ mph), el segundo peor registro de su trayectoria tras el 40% del pasado año.
Para los Yankees, estas son pésimas noticias, porque se abre otro agujero en su bullpen tras la pérdida de Chad Green hace solo unos días. El derecho tendrá que ser sometido a una cirugía Tommy John y se perderá el resto de la temporada.
Sin Chapman y Green, los relevistas Michael King, Clay Holmes, Jonathan Loaisiga, Lucas Luetge, Miguel Castro, Wandy Peralta O Clarke Schmidt tendrán que asumir roles protagónicos para sostener el paso triunfal de la novena.
Hasta ahora, el bullpen ha sido uno de los puntos claves en el rendimiento de la franquicia del Bronx, que presenta el mejor récord de MLB. Para tener una idea, al comenzar la jonrada del lunes, los relevistas de los Yankees eran los que menos jonrones permitían en la Liga Americana, igualados con Houston, tenían la mayor tasa de ponches por cada nueve entradas junto a los White Sox, y eran segundos en promedio de carreras limpias, ponches propinados y juegos salvados.