El antillano Yuli Gurriel, sigue trabajando de manera formidable dentro de la novena de Gwinnett, sucursal Triple A de Atlanta Braves. A sus 40 años, «La Piña» luce madero en mano mejor imposible, situación que demostró una vez más durante la jornada de este sábado 6 de julio.
Para el choque que se llevó a cabo en el «CHS Field», hogar de St. Paul Saints, filial de Minnesota Twins, Braves llegó con la convicción clara de buscar una victoria y para ello debían contar con el potente bate de Gurriel.
El cubano alineó para el duelo como cuarto en el orden ofensivo e inicialista. Indudablemente, desde el segundo número uno desplegó su show de poder.
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Yuli Gurriel no desperdició oportunidades
Para la alta del primer episodio, el cubano compareció al home para tomar su respectivo primer turno ante los envíos del zurdo, Aaron Rozek, con hombre en la inicial y dos outs. Con el conteo en 2-1, este hizo swing a un cutter que viajó a 87.7 MPH. El choque depositó la pelota en lo confines del center field, convirtiéndose en su primer imparable del juego.
Sin embargo los esfuerzos no fueron suficientes y aunque Gwinnett se fue arriba 1×0, el antillano quedó varado en la antesala.
En su segunda oportunidad al plato, esta vez en la alta del tercero con el encuentro igualado a una carrera con un out, «Piña Power» hizo gala de su paciencia, donde esperó cinco lanzamientos de los cuales cuatro fueron bolas, para así poder consolidar su pasaporte a la inicial. Pero, una vez más, su actuar no se tradujo en carreras y la entrada se fue al olvido producto de un doble play por batazo de Eddie Rosario.
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La alta del quinto para el cubano fue aún mejor. Todavía ante los envíos del abridor Rozek, Yuli Gurriel llegó al plato con las bases limpias y un solo out. Con calma revirtió un conteo en 0-2 al chocar una bola rápida de cuatro costuras a 88.1 MPH, que se plantó como su segundo hit de la noche.
Con los suyos arriba 3×1, Yuli quiso ayudar más y en un descuido de la defensa logró estafar la intermedia de forma satisfactoria, la octava de la campaña para el antillano. Pero la situación no pasó a más y no gozó de la dicha de trotar por la registradora.
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El séptimo episodio presenció a un nuevo lanzador por Minnesota. Scott Blewett, recibió a Yuli Gurriel con dos outs y bases limpias. Sin embargo, para el relevista fue un paseo y lo dominó en 0-2 con fly al center field.
Finalmente, «Piña Power» no vio turno en el noveno y concluyó su accionar de 3-2 con un boleto y dejó average de .267. Asimismo, Gwinnett se alzó con la victoria número 40 de la zafra con score de 4×1.
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