Por Gian Franco Gil
Miguel Antonio Vargas dio otra muestra de su poder al bate en esta jornada dominical. El cubano sacó la pelota del estadio para poner en ventaja a su equipo del nivel Triple A. Vargas defendió la tercera base de los Oklahoma City Dodgers y alineó como primero en el orden ofensivo. Enfrentando a los Salt Lake Bees conectó un jonrón que rompió el empate sin carreras.
En la parte baja del tercer capítulo tocó el turno ofensivo al capitalino que con dos outs. En conteo de dos strikes e igual número de bolas y con hombre en segunda disparó un abrazo de cuatro almohadillas entre el jardín izquierdo y el central para poner las acciones 2-0. Finalmente, el choque terminó 8×3 en favor de Oklahoma City, la sucursal de los Dodgers de los Ángeles, donde Miguel Antonio ha tenido oportunidad de jugar.
En este partido el habanero se fue con un imparable en cuatro oportunidades, dos impulsadas y una anotada, además de un ponche. Ese batazo fue clave para abrir el marcador en un juego que se fue abriendo y tributó al balance de 37 victorias y 23 derrotas de su equipo.
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Quien luce el 21 en su uniforme llegó a diez jonrones con el de esta tarde, a 43 remolques y 52 anotadas. También, en esta temporada acumula seis robos de base y 65 hits en 229 veces al bate, que promedian average ofensivo de .284. Durante su carrera en Ligas Menores, el hijo del otrora estelar tercera base de los Industriales Lázaro Vargas ha impulsado 226 carreras y anotado 261. Igualmente, acumula 42 cuadrangulares, 37 bases estafadas, average de .311 y un OPS de .864.