PorJesús Alaín Fernández
Como habíamos anticipado, los Dodgers de los Ángeles se fueron por la opción de dejar ir e indemnizar al derecho Joe Kelly por un valor de cuatro millones de dólares. El Mariachi finalmente no volverá a jugar vestido de azul en Chávez Ravine.
Joe pasó por el quirófano en el último “offseason” y se perdió el inicio de la temporada 2021. Ahora mismo, luego de una lesión durante la postemporada ante los Bravos de Atlanta, se encuentra en franco proceso de recuperación. Aunque las últimas noticias hablan de que estará de vuelta para el “Opening Day del 2022” y se estima que empiece a lanzar pelotas en seis semanas la duda vuela sobre su cabeza.
Quizás esa sea la razón que colmó la copa, pero los Dodgers estaban pesando los otros 12 millones de motivos para tomarse bien en serio la decisión.
El contrato que estaba vigente entre la franquicia y el pintoresco jugador prevé una indemnización de cuatro millones de dólares si se optaba por cerrar la operación, lo que hace bien poco probable que Kelly pueda regresar al Dodgers Stadium negociando un salario inferior.
Entonces el derecho irá a una agencia libre en medio de la aprobación del nuevo convenio colectivo y la incertidumbre de si su lesión le permite estar a tiempo para la temporada 2022 . Sus números en las dos últimas temporadas, los mejores de su ya extensa carrera, no podrán compensar la incertidumbre que genera su estado físico y el tiempo que tendrá para aportar a su nueva casa.
De Joe, como antes habíamos escrito, se quedan los Ángeles con su cartel, el diseño de vestuario en su visita a la Casa Blanca y un rendimiento excelente siempre que estuvo de spikes en el clubhouse.