Por Andy Lans / @DeportesAndy
Es 16 de julio de 2022. John González Buchana, junto a un grupo de personas, ingresa a la frontera de México con Estados Unidos. Todos se entregan en manos de los oficiales. Durante los próximos tres días y ocho horas, el futbolista cubano permanecerá recluido. El frío penetra su cuerpo. También el hambre dice presente. Son tantas personas en una celda, que dormir parece imposible. Ni siquiera hay un espacio donde acostarse. Sin embargo, este sacrificio acaece como escalón postrero de su trayecto.
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John atravesó varios países antes de arribar a suelo norteamericano. En Guatemala, por ejemplo, las difíciles lomas obligan al guía a detener la marcha en más de una ocasión. La fatiga y falta de aire encuentra una presa fácil en los caminantes. En el aeropuerto de Cancún, ya en suelo mexicano, permanecen escondidos en el baño por más seis horas a fin de no ser capturados por las autoridades migratorias. Varios detalles encierra su historia de migración. John decide guardar ciertos pasajes para sí y para su familia. Mi papel como periodista cede en este caso al lado humano, y respeto su determinación.
“Salí de Cuba para mejorar económicamente y ayudar a mi familia. Por otra parte, deseo desarrollar mi talento futbolístico en este país. Aquí puedo tener un mejor futuro en ese sentido” nos cuenta.
El diestro atacante de 19 años posee capacidad para desempeñarse como extremo, mediapunta y delantero centro. Lo caracteriza el buen golpeo con ambas piernas, su devoción por asistir jugadas de gol y un don particular para las jugadas a balón parado.
“Comencé en el fútbol a los nueve años. Primero vi el tenis de mesa como mi deporte favorito. Después, mi hermano York González me convenció para ir al fútbol porque decía que, a diferencia de los demás deportes, este era especial” añade el oriundo del municipio Minas, provincia Camagüey.
Tu ídolo de la niñez.
—Desde chiquito admiré a Cristiano Ronaldo por su sacrificio. Eso lo ha llevado a obtener sus logros. Mi otro ídolo es mi hermano York, quien me ha guiado a ser disciplinado y dar el máximo.
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En 2017, John ganó el título nacional sub 15 con el representativo de Camagüey. También en dicha categoría, viajó con la Selección Nacional a un torneo por invitación desarrollado en Islas Caimán en 2018 donde finalizó subcampeón tras perder la final con el elenco de la Academia del DC United estadounidense. Pero su momento más importante en el deporte, lo vivió en Italia cuando el Udinese le brindó la posibilidad de realizar unas pruebas.
“Fui a Italia con York en septiembre de 2021. Nos quedamos en la casa de un amigo que pagó el viaje. La primera semana, mi hermano y yo entrenamos por nuestra cuenta. Corríamos alrededor de la casa, y golpeábamos la pelota en una cancha cercana. No llegamos en las mejores condiciones físicas porque antes de salir del país nos había dado el coronavirus, y tampoco recibimos entrenamiento en Cuba.”
›»Cuando nos introducimos en las instalaciones de Udinese, yo entrené allí durante tres días. Mi hermano estuvo ocho, pero el club lo mandó otros equipos porque, como la plantilla estaba llena, no se pudieron quedar con él. Al final, necesitábamos un permiso para estar legal en Italia, pero no lo pudimos conseguir porque se vencía la visa. Un agente le dijo a York que regresara a Cuba. Ellos lo volverían a llamar en 2022 si mantenía el rendimiento, pero no sucedió. Yo iba a realizar pruebas en otro club, pero tampoco se concretó la idea.
¿Qué ocurrirá con John González en el futuro?
—Bueno, aquí en Estados, pienso prepararme para estar al 100% en el plano físico. Quiero probarme en diversas academias hasta lograr una firma profesional.
