Por Yasel Porto
La presencia de Cuba dentro de la Serie del Caribe no solo ha generado mucha polémica a lo largo del tiempo y hoy día no solo el panorama es bien complejo para la participación del campeón de la Serie Nacional sino también de manera individual.
Se trata del cobro de los premios individuales y de tener acceso en el tiempo necesario al visado del país que acoge el certamen regional. Lógicamente que en tal sentido nos referimos a aquellos jugadores que intervienen con clubes de otros países del área con la presencia oficial de la Federación Cubana de Béisbol.
A propósito del tema nuestro colega Nelson de la Rosa, quien labora con la entidad caribeña, tuvo la oportunidad de conversar con el Presidente del Sindicato de Peloteros de la Confederación con el objetivo de argumentar la realidad actual y las opciones de que tal situación pueda tener una mejor salida.
“Todo depende del convenio que tengamos con la Confederación del Caribe. Ahora mismo los únicos peloteros cubanos que el Sindicato puede defender son los que juegan en nuestras ligas de invierno amparados por los contratos profesionales que tengan con esos equipos, sin la FCB de por medio. Con los que juegan en Puerto Rico, por ejemplo, para mí es bien fácil protegerle sus derechos”, comenzó diciendo Yamil Benítez.
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El exjugador de Grandes Ligas también habló de su experiencia cuando lidió con las autoridades del béisbol en Cuba, pero el acceso siempre fue bien limitado. “No llegábamos demasiado lejos porque ellos no lo permitieron y mucho menos con los peloteros. Eso era un problema y yo se lo decía a ellos, que estaban buscando tal cosa, como lo de los premios, y ellos no dejaban que nos reuniéramos con los peloteros que es lo que hace el Sindicato. Eso nunca se ha dado”.
El líder de la organización de los jugadores caribeños consideró que la razón de no haber progresado en la relación entre los peloteros cubanos y el Sindicato del Caribe fue básicamente por la reticencia de quienes estaban al frente de la delegación cubana para desarrollar el mecanismo habitual de este organismo en este tipo de cuestiones.
“No perteneces a la Confederación, estás como un país invitado y entonces yo puedo llegar hasta donde la Confederación me permita a través de este convenio. La diferencia entra Panamá y Colombia es que ellos no han tenido problemas de que nosotros nos podamos reunir con sus jugadores, aunque esos países no sean miembros plenos de la Confederación. Y allí le explicamos el por qué de las cosas. Incluso muchas veces cuando eso pasaba y había algún tipo de dificultad nosotros le mostrábamos a los jugadores el documento oficial firmado por su propia Federación y no te puedo explicar cómo se ponían ellos al ver las cosas que se habían acordado a nivel superior sin el consentimiento de ellos. Con Cuba no pudimos nada jamás porque no pudimos tener ningún diálogo”, concluyó Yamil.
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La falta de acuerdo entre Cuba y la Confederación no deja que el Sindicato puede tener el poder legal para ayudar en el tema del dinero para los premios en el torneo y mucho menos algo más complejo como la obtención del visado. El último en sufrir este problema fue el slugger capitalino Lisbán Correa, quien después de ser el MVP en la final de Panamá se le anunció que la demora de su visado para entrar en Dominicana lo marginaba del plantel canalero.
Hace dos años se generó gran polémica cuando el Presidente de la Confederación del Caribe, el dominicano Juan Francisco Puello, informó que finalmente Cuba no podría participar más en el evento por no entregar a tiempo la documentación pertinenente e incumplir con otras acciones fundamentales dentro de ese proceso. La FCB y el INDER rebatieron eso y acusaron a Puello de buscar argumentos falsos para tomar la decisión, a pesar de que gracias al propio funcionario el béisbol cubano logró insertarse otra vez en este contexto desde 2014.
Aunque se ha filtrado que existe una posibilidad del regreso del país que organizó y gano la primera Serie del Caribe y que dejó de estar recientemente tras su regreso en 2014 en calidad de invitado, muchos consideran que el nuevo retorno de Cuba demorará un poco más. Y en ellos dependerá, a criterio de especialistas del tema, que la Serie Nacional se convierta en un verdadero campeonato profesional como el resto de los que toman parte de esta competición.
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