Por José Alejandro Rodríguez Zas
El destacado boxeador cubano Yordenis Ugás vivió en los últimos días momentos maravillosos junto a su querida madre en la ciudad de Panamá, dos años después de verla por última vez desde que se fue de Cuba, en el mismo sitio.
Ugás, uno de los mejores boxeadores antillanos del momento, vencedor por unanimidad ante la leyenda filipina Manny Pacquiao en agosto pasado durante una emocionante pelea celebrada en Las Vegas, sumó otro éxito en su vida personal, tras compartir unos días con su madre.
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«Estoy agradecido de haber pasado unos días en Panamá con mi mamá. Dos años la última vez que la vi en este mismo país. Con el favor de Dios espero este reencuentro me de el combustible y la motivación para trabajar duro por lo que está por venir. Mi madre me dio todo, incluida mi fe. De niño no teníamos nada, solo la fe de pelear por un mejor mañana. Que Dios me la bendiga siempre», escribió el pugilista santiaguero en su perfil de Facebook, mientras compartía algunas imágenes del emocionante momento.
«Estoy muy agradecido. Gracias a Dios y a las cosas que existen he tenido la bendición de viajar y pasar unos días con mi madre. Hace dos años no la veía. Pero a pesar que el tiempo con ella pasa rápido, cada día he dedicado unas horas para continuar haciendo el trabajo. Vamos a una pelea histórica y extremadamente dura. Pero con la bendición de Dios, trabajo duro y con fe. se puede creer, se puede soñar. Este reencuentro con mi mamá me dará mucha fuerzas para continuar. Les deseo que nunca les falte la bendición de tu madre. Tengan buen día», agregó el estelar boxeador.
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Como se sabe, Ugás es un activista por una Cuba mejor, lejos de la realidad que se vive hoy y sus acciones frecuentes en ese sentido, además de enarbolar la bandera y consigna de «Patria y Vida» dentro y fuera del cuadrilátero, hacen difícil que el cubano pueda viajar a la Isla a reunirse con sus familiares.
Dos años después de obtener la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, Ugás escapó de Cuba rumbo a México y de ahí cruzó la frontera hacia Estados Unidos, para iniciar su camino como boxeador profesional. A lo largo de su carrea, acumula 27 éxitos y solo cuatro fracasos, convirtiéndose en Super Campeón welter de la Asociación Mundial de Boxeo.
Sin embargo, el día que el Yordenis decidió ir en busca de cumplir sus sueños dentro del ring profesional, tuvo que dejar atrás a su familia en Cuba, incluyendo a su amada madre, su razón de ser en la vida, a quien no pudo ver en nueve años.
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Sobre el tema, el boxeador cubano habló en una ocasión:
«Fue lo más difícil que tuve que hacer en mi vida. Nueve años sin ver a mi familia, no sólo a mi madre. Fue muy difícil porque me fui buscando ser campeón del mundo y tratando de ser libre más que nada».
Para bien de Ugás y de muchos deportistas cubanos que no pueden o no desean viajar a la Isla, en la última década se han abierto posibilidades al turismo cubano en otras naciones como México, Dominicana y Panamá, permitiendo que muchas familias se reencuentren.
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