Por Álex Fernández Fernández
Como mismo hizo a inicios de año cuando pretendía el Título de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), la estrategia de Robeisy Ramírez es no perder tiempo y alistarse para defender lo que tanto esfuerzo le costó.
La muestra está en sus redes sociales que nos dicen que no va de farol en eso de resguardar su corona, la misma que ganó el 1 de abril tras vencer a Isaac Dogboe.
En esta oportunidad se le puede ver en su rutina en el gym enviando un claro mensaje a su rival. La propia publicación dice: “Día de trabajo físico. Continuamos la preparación de cara al próximo compromiso”.
Y no le falta motivación, el la tiene clara: si quiere vencer el próximo 25 de julio a Satoshi Shimizu en su propia casa de Japón tendrá que hacerlo todo perfecto.
Para tal situación no le alcanzará la historia reciente y mucho menos los títulos Olímpicos de Londres y Río de Janeiro de 2012 y 2016.
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Mientras, se le ve con el puño en alto y mostrando sus bíceps en señal de fuerza. Además realizando ejercicios con ligas, pesas y un completo trabajo físico. Algo más que demandado para la exigencia del máximo nivel del boxeo profesional.
En las fotos que posteó en su cuenta de Instagram también se le ve con una gorra negra con un cartel que anuncia: “Número uno”, clara señal de que Robeisy siente que comanda la competencia en la Organización.
Asimismo, puede notarse la ayuda y auspicio de su entrenador personal, un elemento crucial para que Robeisy pueda mantener la concentración total en el trabajo.
Sonriente, el boxeador cubano nos ha mostrado una compilación de parte de su día a día como profesional, que alista su cuerpo para una gran batalla atlética.
La próxima parada, la tierra del Sol naciente, en la Ariake Arena de Tokio, donde tampoco se la pondrá fácil el experimentado asiático, quien debutó como profesional en 2016 y lleva registro de 11-1 con 10 KO.
