Por Yanio Zulueta
Cada vez con más frecuencia se utiliza la palabra “crisis” para referirse a la actualidad del béisbol cubano. A veces sin ningún análisis objetivo y sin definir muchos aspectos los aficionados dan criterios y esto sucede con la gran mayoría. Siempre se dice que la gran mayoría no puede estar equivocada, pero SwingCompleto, el original, analizará cada aspecto de nuestro béisbol para llegar a una conclusión.
Lo primero que debemos conocer es el significado de la palabra. Una crisis es un cambio negativo, una situación complicada, difícil e inestable durante un proceso. También puede referirse a escasez o carestía.
Conociendo el significado de la palabra vamos a dividir varios aspectos que rodean del béisbol cubano, pero, teniendo en cuenta que todos se correlacionan.
- Serie Nacional de Béisbol (calidad, organización, elementos técnicos y tácticos)
- Resultados internacionales (Se toma en cuenta todos los eventos que ha asistido Cuba y sus conjuntos) Ejemplo: Serie del Caribe
- Calidad de los peloteros cubanos en ligas extranjeras
- Trabajo desde la base
Serie Nacional
La Serie Nacional probablemente sea la peor liga en cuanto a organización y seriedad se refiere. Al paso que va nunca mejorará su nivel y estamos seguros que para hacerlo tienen que haber un cambio total de mentalidad. Bajos salarios de los peloteros, empleados y mucha falta de estímulo han desatado un torbellino de críticas sobre un campeonato que siempre ha tenido sus manchas.
Entre miles de adversidades e inconveniencias el talento predomina en la Serie. En el nuevo siglo mucho de nuestros peloteros que han triunfado en ligas extranjeras han salido de ella e incluso, ahora que el éxodo va en ascenso sigue exportando talento.
Desde que se anuló el pacto entre la Federación Cubana de Béisbol (FCB) Y Major League Baseball (MLB) 28 peloteros que han jugado al menos unos partidos de la Serie Nacional han buscado destino en otras ligas.
El nivel de la liga no pasa por su mejor momento, pero sigue teniendo buenos jugadores, claro la mayoría salen de la isla. Para que la Serie Nacional esté en crisis no pudiese existir ningún punto positivo que la rodea, pero, si aún no está en crisis va camino a ella.
¿Por qué? Porque muchos de los peloteros jóvenes no quieren jugar la Serie Nacional y se van a edades tempranas, más de 100 peloteros juveniles han salido del país en los últimos tres años según datos del MINREX y ninguno jugó en la Serie Nacional. Esa cifra puede aumentar y no necesariamente para ir a jugar en MLB si no en cualquier liga que les paguen.
Resultados internacionales
Paupérrimas se catalogan las últimas actuaciones de Cuba en eventos internacionales e incluso siendo vencidos por países que no tenían una tradición beisbolera como la nuestra, tales como Nicaragua, Canadá u Holanda.
Ahora, si vamos a tomar los resultados internacionales para medir un béisbol debemos entonces mirar a muchos países con torneos profesionales y no han obtenido resultados internacionales. Como ejemplo tenemos a Venezuela y México.
Llamativo es el caso de Estados Unidos que tiene el llamado mejor béisbol del mundo y tuvo que esperar 11 años para ganar el Clásico Mundial. Ojo, no estoy comparando el béisbol cubano con los demás, solo que no creo que un béisbol esta crisis por prescindir de grandes resultados como país.
En resumen, Cuba no gana eventos internacionales por varias razones, la principal de todas: Nuestras mejores figuras y los mejores talentos no juegan con la selección ¿De quién es la culpa? En este aspecto si hay una crisis.
Calidad del pelotero en ligas extranjeras
De gran nivel y en ascenso. La temporada pasada igualamos el record de peloteros cubanos jugando en una campaña de MLB (30). Se impusieron marcas colectivas de jonrones y carreras empujadas. El novato del año en la Liga americana terminó siendo el cubano Yordan Álvarez, el máximo jonronero fue Jorge Soler (48 HR), el que más carreras remolcó resultó José Dariel Abreu (126 RBI) y el mejor cerrador de la Liga Americana, Aroldis Chapman (38 JS).
Por otra parte, más de 130 peloteros cubanos vieron acción en Las Menores, entre ellos el mejor bateador de toda Minor League Baseball (MILB), el avileño Luis Robert Moirán.
Si analizamos el béisbol japonés también tuvimos destaque, el premio de MVP de la final de Nipon Profesional Baseball (NPB) se lo llevó Yurisbel Gracial. Además, Dayán Viciedo, Alfredo Despaigne, Alexander Guerrero y Liván Moinelo dejaron buenos números. José Miguel Fernández destrozó la Korean Baseball Asosiation (KBO) y Dariel Álvarez fue el MVP de la Liga Mexicana del Pacifico (LMP).
Nuestros peloteros en ligas extranjeras siguen brillando y con la oleada de jóvenes que tenemos en MILB y/o esperando contratos en otras ligas la calidad no se deteriorará.
Trabajo desde la base
Este aspecto es muy importante en los planes del presente y el fututo de nuestro béisbol. Los peloteros llegan con miles de deficiencias a la Serie Nacional y eso es por causa de los entrenadores de la base quienes están en la misma situación de los peloteros: carencias de implementos, terrenos en malas condiciones así como salarios muy bajos. Ese ese es el principal motivo para emigrar.
Muchos de los preparadores que quedan en la isla tienen que dar clases particulares y su objetivo es explorar gran parte de los pequeños talentos para infórmales a scouts extranjeros, es una de las formas que utilizan para ganarse la vida.
Sin dudas el trabajo de la base es pésimo, los peloteros nuestros llegan a otras ligas con bastantes dificultades lo que deja mal parado el trabajo de los entrenadores en el béisbol cubano. Los viejos métodos, antiguas metodologías han hecho que este aspecto sea uno de lo que más golpea al béisbol.
Conclusión
La Serie Nacional está por llegar a una crisis, los resultados internacionales son fatales y el entrenamiento de los pequeños talentos es mediocre. Entonces, ¿qué es lo único que separa al béisbol cubano de una horrenda crisis? Nuestros peloteros. Cuba es una fábrica de peloteros y lo seguirá siendo, porque lo llevamos en el ADN.
Pasará el tiempo y se avecinaran nuevas cosas, pero internamente el béisbol cubano, parece enrumbarse a un abismo sin salida.