PACIENCIA: Oscar Luis Colás podría no firmar hasta el 2022

Por Juan Páez

Luego de que le ganó el pulso al Fukuoka SoftBank Hawks en Japón para poder quedar libre y encontrar casa en Grandes Ligas, Oscar Luis Colás quizás tenga que seguir a la espera de una organización. ¿La razón? Todas o casi todas las organizaciones ya tenían destinados montos a los determinados peloteros que firmaron en el presente proceso de firmas internacionales, que arrancó el viernes y se extenderá hasta el 15 de diciembre de este año.

Un motivo muy importante que se combina con el primero es el precio que podría tener Colás, sobre todo cuando se ha ganado el apodo de “Ohtani cubano”, gracias a su capacidad de bateo y pitcheo. Todas sus cualidades como jardinero, bateador y lanzador hicieron que los scouts lo situaran en el segundo lugar de las mejores promesas foráneas, solo por debajo de su compatriota Yoelqui Céspedes, quien acaba de firmar con los Medias Blancas de Chicago.

No sería descabellado pensar que Colás se lleve alrededor de cuatro millones de dólares al momento de su firma, cifra que recientemente obtuvo su coterráneo Pedro León por estampar su rúbrica con los Astros de Houston. Pero por esa misma razón, aunque no descartan un repentino acuerdo, es probable que deba esperar hasta el próximo año.

El siguiente periodo de firmas internacionales será un mes después de que finalice el actual, pues se abrirá el 15 de enero de 2022 y terminará el 15 de diciembre de ese mismo año. Sin embargo, es posible que desde ya alguna organización de las Grandes Ligas tenga conversaciones o incluso un vínculo verbal con Colás y su representante. Es normalmente lo que hace cada uno de los 30 equipos como para asegurar que nadie más obtendrá a equis jugador.

¿Quién es Oscar Luis Colás?

Si usted tiene dudas sobre quién es Oscar Luis Colás, bastará solo con darle una lectura a su scouting report, disponible en MLB Pipeline.

En la escala de calificaciones de los cazatalentos, que va de 20 a 80, las mejores armas del jovencito cubano de 22 años son el poder y el brazo, ambas cualidades situadas en 60. Luego le siguen las demás: el bateo, fildeo y velocidad en las almohadillas obtuvieron una calificación de 55.

Pero más allá de eso, el antillano es capaz de jugar los tres jardines, tiene experiencia en la tercera base y su recta, como lanzador, se mantiene alrededor de las 95 millas por hora. Esa bola rápida la acompaña con un pitcheo rompiente.

Desde Cuba hasta las ligas mayores y menores de Japón, Colás ha demostrado su calidad como bateador. Su habilidad como serpentinero está por ser vista, pero seguramente jugará un papel fundamental al momento de firmar el contrato con una organización de las Mayores, sea en 2021 o (más probable) en 2022.

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