Aliet Arzola Lima
Todavía en el perfil de Juan Miguel Echevarría en World Athletics no hay ninguna referencia al 2022, básicamente porque el mejor saltador cubano del momento no ha competido este año. La última vez que el agramontino afrontó una competencia oficial fue el 2 de agosto del 2021 en la final de la longitud en los Juegos Olímpicos de Tokio, donde, a pesar de lesionarse, obtuvo la medalla de plata.
Te puede interesar: ESTÁ DE VUELTA pertiguista cubana Yarisley Silva tras reciente «BAJA» del equipo nacional
Sacando cuentas podremos percatarnos de que Juan Miguel lleva nueve meses alejado totalmente de los escenarios competitivos. En principio, era lógico que se tomara un tiempo para recuperarse por completo de sus lesiones, pero después sus entrenadores solo han hablado de “estrategias de preparación” para justificar sus repetidas ausencias, tanto en la temporada invernal como en el inicio de las lides al aire libre.
Si nos guiamos por las informaciones de la cúpula directiva del atletismo cubano, Juan Miguel no está lesionado. Sin embargo, esas propias autoridades del deporte rey en la Isla han dejado fuera al saltador camagüeyano de la nutrida escuadra nacional que nos representará en el Campeonato Iberoamericano de Alicante, España.
Hasta 40 deportistas viajarán al Viejo Continente para una de las primeras pruebas al aire libre de la presente campaña. Por así decirlo, hasta el portero del Estadio Panamericano ha sido incluido en la nómina, pero no Juan Miguel. La justificación de su ausencia es la misma de los últimos tiempos: “las estrategias de preparación”, ahora apuntando al Mundial de Oregon, que se celebrará dentro de dos meses en Oregon, Estados Unidos.
Te puede interesar: CONFESÓ Eduardo Paret realidad de HISTÓRICO encuentro con Derek Jeter
No me gusta cuestionar los entrenamientos y las planificaciones de los preparadores, pero uno pensaría que, a dos meses del evento principal del año y tras nueve meses sin acción competitiva, no le convendría a Juan Miguel mantenerse solo entrenando y prolongar todavía más el período que lleva sin chocar con la realidad en las pistas
Tras todo este tiempo, y con el Mundial al doblar de la esquina, entiendo que sería más inteligente probar a saltador de 23 años en un torneo no tan exigente como el Iberoamericano y después subirle la parada en otros eventos de mayor exigencia, a menos que persistan las lesiones, o a menos que te hayan bajado del avión por posible “desertor”.
Pero eso es solo una apreciación personal de alguien que, como les dije, no está posición de cuestionar este tipo de decisiones al no conocer todas las interioridades que marcan el día a día del atleta. Esperemos para ver si a corto plazo conocemos más detalles y los motivos reales de por qué Juan Miguel Echevarría no ha podido reanudar su actividad competitva tras nueve meses en blanco.