Análisis MLB: ¿Lesión de Edwin Díaz afectaría el futuro del Clásico Mundial?

Por Jesús Pérez Vichot (Chuchi)

La lesión de Edwin Díaz pudiera influir en futuras decisiones o medidas para el Clásico Mundial de Béisbol.

Mucho se está comentando acerca de la inesperada lesión del estelar cerrador boricua Edwin Díaz y la posible repercusión que pueda ejercer sobre todo en los dueños de los equipos de las Grandes Ligas.

El relevista de New York Mets y la selección puertorriqueña fue el mejor en su especialidad la pasada campaña en Las Mayores y firmó un contrato por cinco años y 102 millones de dólares con la franquicia neoyorquina (NL).

La lesión sufrida por Díaz fue tan severa que necesitó cirugía y aunque el derecho de 28 años de edad ya dejó saber en las redes sociales que se siente bien y la operación fue un éxito, lo cierto es que se perderá la temporada 2023 de MLB.

La ausencia de Díaz en el bullpen de Mets será más que notable. No solo es una gran pérdida para uno de los equipos aspirantes al título este año, sino para todo el béisbol, que va a prescindir de uno de los más talentosos y mediáticos pitchers de la Gran Carpa.

Ahora bien, es lógico que entre los aficionados de este deporte surja la duda o interrogante de cómo reaccionarán los dueños de los equipos de MLB ante lo sucedido.

Más allá de la disposición que pueda mostrar un jugador en representar a su país en el Clásico Mundial, hay otros factores que inciden en su participación o no en estas justas.

Para la mayoría de los fanáticos es un enorme placer y orgullo que las grandes estrellas de las Grandes Ligas los representen en eventos internacionales. Pero hay que tener en cuenta que no solo se trata de compromiso o patriotismo, en ocasiones lo más recomendable es que no participen.

Esta última opción, la de declinar asistir al Clásico Mundial, muchas veces se puede interpretar como una falta de amor, lealtad y compromiso con el país y la afición que deben representar. Algo que generalmente está bien distante de la realidad.

En algunos casos el equipo al que pertenece un determinado jugador le prohibe jugar en el Clásico Mundial por diferentes motivos. Uno de tantos ejemplos que se pudieran mencionar se dio con el dominicano Luis Severino.

Al lanzador derecho, Yankees le prohibió asistir a este certamen debido a las continuas lesiones que ha sufrido en los últimos años. Severino estaba dispuesto a vestir la franela Dominicana, pero finalmente entendió el por qué de la negativa de su equipo.

Hay otros que no asisten a estos Clásicos simplemente porque prefieren descansar, pasar más tiempo con su familia o enfocarse en la preparación para la nueva campaña.

En cualquiera de los casos son decisiones que se deben respetar. Hay que tener en cuenta que los peloteros que juegan en Las Mayores se deben a sus franquicias. Al firmar un contrato, las cláusulas y demás requisitos ya están incluidas en el mismo.

Siempre resulta reconfortante disfrutar de la actuación en el campo de juego de las grandes estrellas de MLB. Aunque no todos los fanáticos lo pueden interiorizar, hay que recordar que estos jugadores dependen mayormente del salario que perciben en su Liga, pues es su profesión.

Por lo que la prioridad de cada uno de ellos es estar saludable para la temporada regular de las Grandes Ligas. Esto no quiere decir que no muestren interés en representar a su país, para nada, pero «el trabajo primero».

Esta mentalidad no es la misma para todos los integrantes de los equipos que participan en el Clásico Mundial. Pues, aunque son los menos, hay jugadores que no poseen un gran talento, ni se desempeñan en ligas importantes. Por lo que prácticamente no tienen objeciones para poder participar en estas justas. El proceder ante ellos y las opciones de estos peloteros es diferente.

Esta lesión de Edwin Díaz seguramente ha puesto a pensar a los dueños de los equipos de MLB y no es para menos. Sin embargo, hasta el momento hay diversidad de opiniones.

El mismo Hal Steinbrenner (dueño de New York Yankees) ha dicho que una lesión puede aparecer en cualquier momento o lugar y que veía positivo que existiera un evento como el Clásico Mundial.

Otros directivos, hasta managers, jugadores y ex jugadores, han expresado su inconformidad con la fecha en que se lleva a cabo este torneo. No es menos cierto que coincide con los entrenamientos primaverales de los equipos de MLB.

Estos jugadores no llegan en óptima forma al Clásico Mundial, ni siquiera en un 85%. Luego de pasar varios meses inactivos, jugar en un certamen que demanda un alto grado de exigencia puede pasarles factura. Sobre todo a los lanzadores.

Una vez subido a la lomita representando a su país, un pitcher, por muy estelar que sea, no puede darse el lujo de «no exigirse al máximo». Sus compañeros de equipo y la afición no se lo perdonarían, todos esperan su máxima entrega.

El Clásico Mundial no dura mucho más de dos semanas, pero son jornadas muy intensas. Incluso el calor y la tensión de un choque pueden hacer saltar de júbilo a los jugadores. Tal fue el caso de Díaz, que no se lesionó lanzando, sino celebrando.

Las lesiones siempre van de la mano de los deportistas y el béisbol no es la excepción. Es real que estas pueden aparecer en cualquier situación. Puede que lo acontecido con Díaz solo sea un mala experiencia.

Sin embargo, también es cierto que las probabilidades de lesionarse en un evento como lo es el Clásico Mundial de Béisbol son bastante elevadas. El rigor y la entrega con la que se disputa cada partido es impresionante.

Lo cierto es que este año se extrañará la entrada de Edwin Díaz a la grama del Citi Field con el peculiar sonido de la trompeta y que no queda otra que esperar a la próxima edición del Clásico Mundial para saber si seguirán asistiendo los mejores jugadores.

En mi opinión personal, pienso que sí. Ausencias siempre habrán por diferentes razones (algo que se debe respetar). Pero la gran incógnita será si esta lesión de Díaz repercutirá o no para las próximas ediciones.

Scroll al inicio