Por José Alejandro Rodríguez Zas
Si usted es un fiel lector de SwingCompleto y seguidor de todo lo acontece en la Serie Nacional de Beisbol, estará al tanto de la «comidilla» de los últimos días en el campeonato deportivo más importante de la Isla es el tema de las sanciones a los peloteros Andrés Hernández de Industriales y Alexis Miguel Varona de Sancti Spíritus, por «incumplimiento del reglamento de la competencia», según consideraron las autoridades correspondientes.
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El propósito de este trabajo no es llover sobre lo mojado, ya se sabe que a ambos peloteros se les prohibió jugar con sus equipos por tres partidos, luego de verse reducida la medida de los iniciales cinco encuentros, actitud que ha sido rechazada por la mayoría de los aficionados y especialistas de la pelota cubana.
También es conocido que la Comisión Nacional de Beisbol y su líder, Juan Reinaldo Pérez Pardo, han reiterado en varias ocasiones el cuidado que deben tener los peloteros de la serie en dar entrevistas a medios «no oficiales», «independientes» o «no acreditados» en el certamen doméstico, lo cual ha provocado muchas reservas en atletas y directivos para brindar algún tipo de declaración.
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Hace solo unas horas, publicamos en nuestra web una nota en la cual se compartieron las palabras del estelar peloteros espirituano Frederich Cepeda sobre el tema, claramente en contra de las limitaciones absurdas que imponen las autoridades del beisbol en la Isla, quien se mostró indeciso en aceptar una entrevista a la periodista Elsa Ramos, habitual en temas de beisbol para la provincia yayabera y plantilla de la prensa oficialista (además de hacer muy buenos trabajos, por cierto).
Casi al mismo tiempo, trascendió otra experiencia similar, esta vez narrada por el periodista Giovanni Martínez de la Revista Bohemia, quien recibió el rechazo a ser entrevistado por parte del mánager de los Huracanes de Mayabeque, Michael González, en un trabajo para dicho medio, también oficialista.
El suceso ocurrió el pasado sábado 19 de febrero, en el estadio Latinoamericano de la capital, cuando Martínez se disponía a encontrarse con el director de los mayabequenses, «en busca de informaciones para los lectores de Bohemia», portando su debida credencial que lo identifica.
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Sin embargo, una vez que el periodista se encontró con su pretendido y le explicó la brevedad del diálogo y el propósito del mismo, recibió una respuesta negativa por parte de Michael, de forma «tajante», según narra en su nota el propio Martínez.
«Me da mucha pena, no quisiera negarte la entrevista, pero las autoridades de mi provincia me prohibieron dar declaraciones a ningún medio», expresó el joven director de los Huracanes, quien ha guiado al equipo a una excelente temporada.
«No puedo», insistió apenado el mayabequense.
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«Enseguida recordé, aunque me parece inexplicable la vinculación de un asunto con el otro, las sanciones de días antes a dos peloteros», escribió el periodista en su nota, recordando que en la Serie 60, justo en la anterior campaña, el propio timonel le había concedido una entrevista telefónica, «durante los días más duros de la pandemia (…) ¡Qué ironía tan grande!», comentó.
En lo adelante, el periodista emite su criterio sobre todo este asunto, el cual parece extraído de una película de ciencia ficción. ¿Acaso podemos ser capaces de llegar a esos extremismos en Cuba? ¿Quiénes tendrán derecho a entrevistar o simplemente conversar con los atletas cubanos, en especial los peloteros de la Serie Nacional?
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«Lamentablemente, lo acontecido frena el proceso informativo, promueve el desconocimiento y constituye una interferencia indeseada entre el periodista, sus entrevistados y finalmente los aficionados, quienes son en definitiva el objetivo de nuestra labor como reporteros de prensa, así como también tiene que ser la de los directivos provinciales, managers de equipos y jugadores», manifestó muy acertadamente el periodista en su nota.
Y usted, amigo lector, ¿Qué piensa al respecto?