Aliet Arzola Lima
Luego de cosechar en el 2021 una de las mejores temporadas que se recuerden para un lanzador en la Organización Coreana de Béisbol (KBO por sus siglas en inglés), el cubano Ariel Miranda no ha corrido con la misma suerte en la presente campaña. El zurdo natural de San Antonio de las Vegas y as de los Doosan Bears solo pudo realizar tres aperturas y completar 7.2 entradas al inicio de la contienda, y después quedó fuera del radar.
Problemas en el hombro que arrastraba desde el final de la pasada campaña lastraron el desempeño del serpentinero, quien permitió dos hits y siete carreras en sus salidas, con solo ocho ponches y la alarmante cifra de 18 boletos. A la postre, todos estos detalles condujeron al despido de Miranda, mejor lanzador y Jugador Más Valioso de la KBO en el 2021.
Este es un hecho sin precedentes en la historia del béisbol coreano, pues de los siete extranjeros que ganaron el MVP en la historia del circuito, ninguno había sido despedido al año siguiente de conquistar el premio.
Miranda firmó una extensión de contrato con los Bears por valor de 1.9 millones de dólares (1.6 millones en salario y 300 mil en bonos) a finales de diciembre del pasado año, pero ni el plantel ni el lanzador podían imaginar que se daría un giro tan radical a la situación; no se podía pronosticar una lesión sacara de circulación al estelar zurdo.
En cierta medida, los Bears no han tenido mucha paciencia y han dejado libre al cubano, sustituido oficialmente por el zurdo estadounidense Brandon Waddell (cobrará 200 mil dólares por el resto de la campaña y 30 mil dólares en bonos).
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De cualquier manera, la postura del club es la lógica teniendo en cuenta los apuros en que están metidos. La falta de un as en su rotación y otros factores deficientes han convertido la actual temporada en un absoluto fiasco, al punto que se encuentran a 20.5 juegos de la primera posición con balance de 35 victorias, 46 derrotas y dos empates.
Este es un rendimiento ya casi olvidado por los fanáticos de los Bears, equipo finalista en ocho de las últimas nueve temporadas, con tres títulos en ese lapso. Mantener esa línea se antoja ahora muy complicado, sobre todo sin un lanzador de máximo calibre en su rotación.
Miranda ocupó ese rol con ribetes dorados en el 2021, su primera campaña en la KBO después de su periplo por MLB y Taipei de China. El zurdo se comportó como un auténtico as y fue reconocido de esa manera al ganar el equivalente al Cy Young en el circuito coreano, el premio denominado Choi Dong-won.
En total, Ariel realizó 28 presentaciones (21 fueron salidas de calidad) con efectividad de 2.33 en 173.2 entradas de labor, en las cuales aceptó 135 hits, 45 limpias y 11 jonrones, además de conceder 63 boletos y retirar a 225 contrarios por la vía de los strikes. Los rivales le batearon para un anémico .212 y su WHIP quedó en 1.14.
Miranda, ganador también del Guante de Oro, fue líder en efectividad de la liga, sexto en entradas lanzadas y primero en aperturas de calidad, igualado con su coterráneo Odrisamer Despaigne (KT Wiz). Uno de los detalles más relevantes de su rendimiento fue el nuevo récord de ponches que estableció para la KBO, superando el anterior registro, en poder precisamente de Choi Dong-won.
Tras el despido de Miranda, el matancero José Miguel Fernández se queda como el único cubano en la franquicia de los Bears. El estelar toletero zurdo lidera al equipo en hits (101) e impulsadas (52), además de contar con seis jonrones y línea ofensiva de .315/.364/.421.