Miguelito Calderón: Entre la desidia y el abandono

Daniel De Malas Andreu

Miguelito Calderón, gloria del deporte cubano, padece en un centro hospitalario en Cuba en medio del abandono gubernamental.

Miguelito Calderón, gloria del deporte cubano, padece en un centro hospitalario en Cuba en medio del abandono gubernamental.

La desafortunada forma en la que viven los atletas en Cuba se acentúa mucho más cuando estos terminan su carrera activa. Las historias que demuestran a medallistas olímpicos y mundiales en total abandono son algo cotidiano. El entrenador y exjugador de baloncesto, Miguelito Calderón, es la prueba más reciente de estos infortunios, que no son más que sinónimos de la realidad que viven millones de cubanos.

El habanero, quien brindó innumerables glorias a su país de nacimiento, está en una situación delicada de salud, que se agravó mucho más por las desatenciones de las máximas autoridades deportivas del país. La información que sacó a la luz este hecho provino del medio de comunicación El Vigía de Cuba.

Los acontecimientos terribles surgieron cuando Miguelito Calderón ingresó en el Hospital Comandante Manuel Fajardo, que se encuentra en la capital del país. La condición física del mismo lució extremadamente mal, producto del olvido y la desidia gubernamental. El estado de quien dedicó su vida al baloncesto de la isla es deplorable.

El Vigía de Cuba alertó de tal desatino y denunció lo que aconteció. El referido medio criticó duramente las causas que posibilitaron el actual escenario, muy lejos de lo que se merece una personalidad del calibre de Miguelito Calderón.

Miguelito Calderón Entre la desidia y el abandono

«Está ciego. No ve. Y se le ve mal. La otrora estrella del baloncesto, aquel hombre que estuvo en el equipo que ganó un bronce olímpico en los Juegos de Múnich 1972, vegeta ahora en un hospital capitalino, abandonado por todo y por todos».

méritos y resultados destacados de Miguelito Calderón

Miguelito Calderón es uno de los personajes infaltables en la historia del baloncesto cubano. El capitalino formó parte de la escuadra nacional que obtuvo el metal bronceado en la cita cuatrienal de Múnich 1972. En aquel momento, el deporte antillano realizó una proeza inédita, que no ha podido ser igualada hasta nuestros días.

El camino de éxitos del protagonista tuvo otros episodios destacados, entre los que destacó el cuarto puesto en el Campeonato Mundial de baloncesto, que se efectuó en Puerto Rico en el año 1974, en donde demostraron la valía entre lo más excelso del deporte de los encestes y los donqueos.

Miguelito Calderón también fue un punto de referencia desde el banquillo como entrenador, en el cual dirigió al equipo Cuba en el período que comprendió desde el año 1992 al 1999. En esta función, también comandó las huestes de Capitalinos en los eventos nacionales, con excelentes dividendos en los torneos domésticos.

Los años pasaron y el retiro llegó, lo que trajo consigo la caída mediática del especialista. Hoy en día, Calderón posee 74 años de edad y padece en una institución hospitalaria en Cuba, en la que el apoyo estatal está ausente completamente.

Miguelito Calderón Entre la desidia y el abandono