Cuba, México, el sello Anglada…¿el equipo del futuro?

Por Alexander García Milián

Ya se conoce el equipo que viajara a México para los entrenamientos de altura. Sí, los 28 jugadores elegidos llevan desde ahora el sello de Anglada, la estampa de una filosofía ganadora que no cree en el aval de los nombres sino en los que van  a demostrar con hechos al ruedo.

Lo que sucede lectores es que de ideas, de utopías, de eslóganes gastados- hacer más con menos- y cosas así, de eso ya no se vive y aunque han montado todo un show mediático con esta concentración- entrevistas por todo, topes amistosos, entrenamientos de altura- aunque eso pasa…

Reflexionemos entonces un poco; decía Eduardo Galeano que la nostalgia es buena pero la esperanza es mejor, y donde más poder encontrar atisbos de esperanza que en un equipo Cuba dirigido por Rey Vicente Anglada.

Al observar los reportes acerca de los entrenamientos, sobre las rutinas y dinámicas elaboradas para enfrentar el reto del Premier; al mirar cada detalle, la soltura de Rey en las entrevistas, de Figueroa tanteando la preparación física, al ver eso, la niebla empieza a disiparse de a poco.

Pero señores, cuando miremos en profundidad y volvamos a poner el pie en la tierra, nos daremos cuenta de que eso, un equipo así, renovado, un equipo de futuro, armado quizás, de no suceder nada antes, armado para el próximo Clásico Mundial; ahí está la idea del asunto; pues con un equipo así no se puede esperar tan siquiera alcanzar el oro en los Panamericanos- si es la meta máxima…

¿Quién quedaría?, Alarcón, Freddy Asiel, Lázaro Blanco… tres hombres no hacen un equipo.

En verdad son peloteros muy talentosos estos que van a tierras mexicanas, Cesar Prieto, Pablo Guillén, Frank Luis Medina, son futuras estrellas pero ahora para lo que se avecina, el reto, el tamaño de la responsabilidad es inmensa.

Cuando tapan por aquí, llenan con los mimos carteles triunfalistas de siempre todo- sí, saldrá un buen equipo- cuando eso sucede y Anglada pone su sapiencia en función de hacer un buen papel, las miradas se pierden otra vez en busca de un elemento objetivo que permita ver la posibilidad real de victoria que tiene ese elenco.

La situación actual es parecida a la de  España en el fútbol- antes de ganar la Euro de 2008- jugamos cómo nunca y perdimos como siempre; este sin dudas es el gran axioma del momento y lo que impone la dinámica de nuestro béisbol.

El tiempo es el que juzgara, ¿será diferente? por ahora basta decir que magos no hay…

Nos vemos a la vuelta.

Scroll al inicio