En estos momentos no es descabellado decir que Victor Wembanyama es el mejor defensor de la NBA. Por lo menos en el aspecto de los bloqueos es muy difícil discutirle eso, pues promedia 3.5 por encuentro y lidera la liga en esa faceta.

Tampoco es una locura plantear que el francés de San Antonio Spurs ganará el Novato del Año. Prácticamente, una catástrofe o una lesión podría evitarlo. Sus números están más que claros: 20.6 puntos, 10.3 rebotes y 3.4 asistencias en apenas 28 minutos de juego.

Este domingo 17 de marzo, tuvo una nueva demostración de su calidad y capacidad atlética, extraña para alguien de 2.24 metros. Su rival esta vez fue Brooklyn Nets en el Moody Center de Austin, Texas.

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Victor Wembanyama volvió a imponer su presencia en defensa

Pese a que San Antonio Spurs está eliminado y se ubica último en la Conferencia Oeste con marca de 15-53, cada juego toma una importancia extra con la presencia de «Wemby». Siempre se sabe que hará algo extraordinario, bien sea en ataque o en defensa.

Frente a Brooklyn, Wembanyama comandó a los suyos en un reñido duelo que se definió en tiempo extra. Pero para conseguir esa victoria la actuación del alero fue fundamental, pues se anotó un nuevo doble-doble con 33 puntos, 15 rebotes y siete bloqueos.

Uno de esos últimos significó más que una simple acción defensiva. Con apenas 28 segundos para el final de la prórroga y el marcador 116-115 favorable a Spurs, el alemán Dennis Schroeder se dispuso a atacar el canasto. Sin embargo, no sospechó que su bandeja sería alcanzada por los brazos de «Wemby«, quien la estrelló contra el tablero y eliminó la posibilidad que Nets tomara la delantera.

La jugada sería revisada por los árbitros, para corroborar que el tapón se dio antes que el balón tocara el cristal. Tras verlo en la pantalla se dio como válido.

Al final el encuentro terminó 122-115 para San Antonio. Una conquista que posiblemente no cambia nada en la clasificación de la Conferencia Oeste, pero sí aumenta el pronto legado de Victor Wembanyama en su campaña de novato.

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Los vaticinios de un partidazo no fallaron este domingo 17 de marzo, con el choque entre Dallas Mavericks y Denver Nuggets. El American Airlines Center de la ciudad texana sería testigo de un duelo donde, además de los equipazos, se enfrentaban dos de los favoritos al MVP: Nikola Jokic y Luka Doncic. Sin embargo, los titulares se enfocaron en el estelar veterano Kyrie Irving quien se llevó los reflectores.

Para esta cita chocaron sublíder y octavo de la Conferencia Oeste, Denver Nuggets (47-21) y Dallas Mavericks (39-29), respectivamente. La mesa se sirvió para el enfrentamiento de la fecha y terminó siendo mucho más que eso.

Kyrie Irving otorgó victoria a Dallas Mavericks

El juego empezó y se mantuvo cerrado durante la mayor parte del tiempo. Nuggets terminó por encima en el primer cuarto con diferencia de cuatro puntos (30-34) y cerraron arriba al medio tiempo por solo tres tantos (58-61). Sin embargo, la historia fue otra en el tercer tramo (26-18), cuando Dallas Mavericks sacó a lucir todo su arsenal para remontar y estirar ventaja sobre sus adversarios. El último parcial traería un sinnúmero de emociones, no solo porque Denver volvió a la carga, sino porque ambos llegaron empatados a 105.

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La hora de los grandes y el momento de los que están tocados por los dioses llegó. Cuando Maxi Kleber tomó la pelota, el cronómetro marcó un restante de 2.8 segundos para el tiempo extra. Irving apareció como una exhalación desde la línea de fondo, tomó la pelota y condujo par de metros buscando la pintura con nada menos que Nikola Jokic a la marca.

No había tiempo para virarse y el Joker estaba demasiado encimado. Acercándose a la línea de tiros libres la agarró con la zurda y en flotadora hermosa la lanzó por encima de todos a falta de un segundo. Sonó la chicharra final justo cuando la esférica se mecía en las redes.

Kyrie Irving fue el héroe. El estadio vibró con los gritos de los allí presentes y algunos de sus compañeros se tomaron la cabeza con las manos, atónitos. La mayoría de los Mavs, incluida la banca, saltó hacia Kyrie a quien tiraron al suelo de tanta emoción. Kleber, quien inició la jugada, aún no podía creerlo y seguía agarrándose la cabeza, como quien ve lo imposible. Dallas Mavericks derrotó a Denver Nuggets 107-105.

Una vez más, Luka Doncic lideró a Dallas Mavericks con otra buena tarde de 37 puntos, nueve rebotes y tres asistencias. Irving, además de definir, marcó 24 tantos, recogió siete rebotes y repartió nueve asistencias. Por los derrotados, Jamal Murray fue el máximo anotador con 23 cartones, cuatro rebotes y siete asistencias. Por su parte, Nikola Jokic no estuvo en su mejor forma y aún así dejó 16 puntos, 11 rebotes y siete asistencias.

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